Ningún aparcamiento se le resiste: las ruedas de este eléctrico pueden girar hasta 90º

Las ruedas traseras directrices no son precisamente un invento reciente. En los años 80, el Honda Prelude ya contaba con esta tecnología, mientras que Renault lleva más de década y media utilizándola en numerosos modelos, desde el Laguna de tercera generación hasta los actuales Austral, Espace y Rafale. También es muy utilizada por marcas como BMW en sus modelos de mayor tamaño.

Que las ruedas traseras sean capaces de torcer, aunque sea unos pocos grados, ayuda enormemente a mejorar el comportamiento dinámico y la maniobrabilidad del vehículo. Cuando giran en la misma dirección que las delanteras, se incrementa la estabilidad, mientras que al contrario se mejora la agilidad. Por este motivo, la mayoría de sistemas modernos cambian el sentido de giro en base a la velocidad.

En los últimos años, algunos fabricantes han querido aprovechar la mayor libertad que otorgan los motores eléctricos para seguir evolucionando este tipo de sistemas. Sin ir más lejos, el GMC Hummer EV de General Motors cuenta con un modo 'crabwalk' (modo cangrejo) que le permite desplazarse en diagonal, algo especialmente útil en terrenos complicados con poco espacio para maniobrar.

Sin embargo, hasta el momento ningún sistema había llegado tan lejos como propone ahora Geely con su último prototipo. Basado en el SUV eléctrico EX5, el último show car de la firma china no sólo es capaz de girar las ruedas posteriores de forma independiente, sino que tanto las delanteras como las traseras pueden girar hasta 90º, lo que permite al coche rotar sobre sí mismo y desplazarse en literalmente cualquier dirección.

¿Llegará esta tecnología a producción?

Esto es posible gracias a que el prototipo integra los motores eléctricos directamente en las ruedas. Los beneficios son múltiples; por ejemplo, el coche puede aparcar con facilidad en espacios reducidos. Como los ejes delantero y trasero pueden girar de forma independiente, las posibilidades son infinitas: este EX5 realiza maniobras simplemente imposibles en cualquier otro coche.

Geely afirma que esta tecnología garantiza una estabilidad máxima independientemente de las condiciones de la carretera (superficies resbaladizas, fuertes vientos laterales, etc). Eso sí, la compañía por el momento no ha revelado cuándo ni de qué forma se aplicarán estos avances a sus vehículos de producción en masa; de hecho, no está claro siquiera que este sofisticado sistema vaya a llegar a producción.

Además, no todo son ventajas. Por ejemplo, los pasos de rueda se han ampliado para permitir que las ruedas traseras roten 90º, lo que podría restar espacio al habitáculo. Si bien no se han mostrado imágenes del interior, es posible que Geely se haya visto obligada a suprimir los asientos traseros.

Fuente | CarNewsChina