Barcelona instala su primer cargador ultra rápido para autobuses eléctricos

Barcelona ha incorporado dos nuevos autobuses a su flota municipal. Se trata de dos unidades del autobús eléctrico Solaris Urbino. Un modelo articulado que se encargará de mover a los pasajeros de la línea H16, y que además están acompañados de una nueva infraestructura de recarga.

En total serán dos los puntos de recarga que tendrán estos modelos. El primero será un pantógrafo retráctil situado en las inmediaciones del final de la línea. Un sistema automático que cuenta con una potencia de 400 kW, y que en un tiempo de entre 5 y 8 minutos permite al autobús pasar del 40% de carga, la mínima, hasta el 80%.

El sistema de carga por pantógrafo consta de dos elementos. Por un lado, el cargador, que es un pilar de unos cinco metros de altura con una apariencia similar a una farola,. En este caso, Endesa ha construido la infraestructura de carga en la calle Cincel, a pocos metros de una de las terminales de la línea H16.

Por otro lado, está el que es propiamente el pantógrafo, un brazo mecánico retráctil instalado en el techo del autobús que se despliega hasta unirse a la campana del pilar, al que se acopla para iniciar la carga de la batería mientras el vehículo está estacionado.

Se trata de dos autobuses articulados de 18 metros de longitud y capacidad para unos 110 pasajeros, construidos en Polonia por la firma Solaris. Están propulsados ​​por motores eléctricos de 270 kW y equipados con tres baterías aptas tanto para la carga rápida en ruta, como carga lenta en la base. Un pack de 120 kWh, que permite cumplir con las necesidades de la ruta, pero manteniendo el eso contenido así como los costes del sistema.

Como todas las unidades de la flota de TMB, los Solaris Urbino E18 han sido diseñados para cumplir los requisitos de operatividad habituales: 16 horas continuadas de circulación a plena carga, funcionamiento del aire acondicionado en los meses de verano y prestaciones habituales de confort para los usuarios (plataforma baja, 37 asientos, dos espacios para PMR, rampa, sistemas de información a bordo, enchufes USB para cargar dispositivos móviles …).

De momento estos dos modelos están funcionando en fase de pruebas, y en noviembre empezarán a transportar pasajeros. Una apuesta más de la capital catalana por reducir las emisiones contaminantes de los autobuses convencionales, y un nuevo paso de cara a la inevitable electrificación de la flota municipal.

Gracias Luis por el aviso.

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Fuente | TMB