El servicio postal británico se pasa a las furgonetas eléctricas

El servicio postal británico se pasa a las furgonetas eléctricas

3 min. lectura

Publicado: 24/08/2017 13:05

Uno de los principales objetivos a la hora de luchar contra las emisiones contaminantes en las ciudades, son los sistemas de transporte. Vehículos que se mueven una importante cantidad de kilómetros y que supone uno de los mayores problemas de salud dentro de las urbes. Es por eso que las empresas de reparto como la británica Royal Mail empiezan a trabajar en atajar este problema.

Esta semana se han puesto en marcha las primeras 9 unidades de esta furgoneta eléctrica desarrollada el colaboración con la empresa Arrival. Un modelo pensado para le reparto de pequeñas mercancías dentro de Londres y que además de un diseño bastante peculiar y atractivo, cuentan con unas características que se adaptan a sus necesidades.

CityLogin. Logística y distribución urbana de mercancías con cero emisiones en Madrid

Además de un tamaño contenido, fundamental para moverse por el centro de ciudades tan congestionadas como la propia Londres, estos vehículos contarán con una amplia zona de carga. En cuanto a sus características técnicas de momento sólo se ha comentado que contarán con una autonomía de hasta 160 kilómetros con cada carga.

Uno de los aspectos más interesantes de este desarrollo es su proceso de fabricación. Este se produce en la planta de Arrival, situada en la localidad de Banbury. Una instalación que al parecer se aleja de la idea de fábricas artesanales, dejando su paso a una línea de producción totalmente robotizada. Algo que según los responsables de la empresa les permitirá alcanzar una producción anual de 50.000 unidades.

Unos modelos diseñados con un sistema modular que facilita su ensamblado, y también las labores de mantenimiento. Además  según el fabricante estarán preparados para operar de forma autónoma cuando la legislación lo permita.

A esta adquisición se suman las 100 Peugeot Partner eléctricas compradas hace unas semanas, que se integran en un proyecto donde también se tendrá en cuenta el despliegue de puntos de recarga. Una red que servirá de apoyo para extender el alcance de los vehículos y por lo tanto de su radio de acción.

Eso si, la Royal Mail tiene mucho trabajo por delante, y es que su flota está compuesta por 49.000 vehículos. Un enorme proyecto de transformación que permitirá lograr reducir emisiones, pero también ruido y costes en aspectos como el combustible. Un proyecto de lo más interesante que no ha hecho más que empezar.

Relacionadas

Fuente