Tras haber presentado hace unos meses el primer concept car, BMW ha comenzado a probar un nuevo prototipo camuflado de su SUV 100% eléctrico iNEXT, el cual llegará al mercado en el año 2021 y se convertirá sobre el papel en el buque insignia tecnológico del grupo. Es altamente probable que bajo el camuflaje se encuentre un modelo muy cercano al definitivo.
Por el momento, se sabe que el BMW iNEXT será un SUV del segmento E, por lo que será rival directo del Audi e-tron. Aparentemente, será lanzado con un sistema de conducción autónoma muy avanzado de nivel 3; además, la marca también ha querido confirmar que emplearán una flota de iNEXT para desarrollar su tecnología de conducción autónoma de nivel 4.
Esta primera sesión de pruebas con el modelo bávaro está realizándose en el centro de pruebas de invierno que tiene el grupo BMW en Arjeplog, Suecia. De acuerdo con la propia BMW, este modelo «encarna la interpretación pionera del placer de conducir típico de la marca con un tren motriz puramente eléctrico, un sistema inteligente de tracción a las cuatro ruedas y un modelo de tecnología de suspensión específica».
«Las pruebas de conducción con el BMW iNEXT camuflado se llevan a cabo en carreteras cubiertas de nieve y lagos cubiertos de hielo, donde las bajas temperaturas y la mínima fricción en la carretera dominan las pruebas diarias. El frío plantea un desafío, sobre todo, para el motor eléctrico, la batería de alto voltaje y el sistema de refrigeración del BMW iNEXT.
Los ingenieros de pruebas también conceden especial importancia al sistema de gestión de energía eDrive. Analizan la forma en que las temperaturas extremas bajo cero afectan cómo se recarga el sistema de almacenamiento de energía, cómo se transfiere la electricidad al motor eléctrico, cómo se suministra energía al sistema eléctrico y cómo responden los sistemas de calefacción y aire acondicionado.
Los sistemas de regulación de la transmisión y la suspensión de potencia también se prueban mucho más allá de lo que es estándar en las condiciones del tráfico diario. La regulación electrónica sobre las superficies cubiertas de hielo ya se puede probar a bajas velocidades de conducción. Para los ingenieros, esto significa que pueden, por ejemplo, analizar la interacción del sistema de tracción en las cuatro ruedas, que fue especialmente desarrollado para el tren motriz eléctrico, y del DSC (Control dinámico de estabilidad). Entonces pueden optimizar continuamente los procesos en condiciones exactamente reproducibles».
Fuente | BMW