La gran idea de Rivian. Si fabricamos todoterrenos eléctricos, tendremos que instalar puntos de recarga fuera de las carreteras

Hasta ahora las empresas que han extendido sus redes de puntos de recarga han centrado en su totalidad los esfuerzos en cubrir carreteras y zonas urbanas. Pero para el fabricante norteamericano Rivian esto no era suficiente para atender las necesidades de los clientes de sus todoterrenos.

Para ello, Rivian ha confirmado que coincidiendo con el inicio de las entregas de sus primeros modelos durante el verano del 2021, comenzarán también la expansión de su propia red de recarga.

Esta constará de dos niveles: uno seguirá el modelo tradicional cubriendo nudos de comunicación, como autovías. Pero la novedad vendrá de la mano de una segunda «capa» que se extenderá más allá del asfalto, o de las rutas más frecuentadas.

Conscientes de que muchos de sus clientes usarán los vehículos para salir a montar en bici, hacer senderismo o escalar montañas, Rivian extenderá una segunda red de recarga rápida por los emplazamientos de aventura más populares.

Estas estaciones contarán con una toma de carga rápida desarrollada por la propia compañía, que permitirá a los propietarios recuperar unos 225 kilómetros de autonomía en 20 minutos conectados. Una red que no estará cerrada a los modelos de Rivian, por lo que cualquier otro modelo podrá usarla, aunque indican que podrá haber limitaciones por especificar, como por ejemplo, la reserva de ciertos puntos para ser usados solo por los propietarios de un modelo de la marca.

Detrás de esta iniciativa está el facilitar a los propietarios de un Rivian poder desplazarse hasta sus zonas de vacaciones o esparcimiento, pero también poner en marcha un nuevo apartado comercial para la compañía. La oferta de servicios de recarga para flotas, que se convertirá en otro apartado más de la empresa.

Además forma parte de los motivos de esta apuesta el poder tener un control más cercano del funcionamiento de la red. Al depender de terceros operadores, desde Rivian se indica que se pierde el control de aspectos como los pagos, la reserva, el rendimiento. Algo que les ha llevado a descartar un acuerdo con alguno de los principales operadores, y lanzarse a la creación de su propia red.

Un despliegue que comenzará en 2021, y que desde la compañía indican que necesitará entre dos y tres años para completarse.

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Fuente | Rivian