Rimac saldrá a bolsa el año que viene y controlará Bugatti a través de una empresa conjunta con Porsche

Hace apenas unos días, el fabricante de hiperdeportivos croata Rimac presentó su segundo modelo de producción, el Nevera. Esta bestia de 1.914 CV, capaz de hacer el 0 a 60 millas por hora (0-96,6 km/h) en 1,85 segundos y de alcanzar una velocidad punta de 412 km/h, es un paso fundamental dentro de la corta pero exitosa historia de la compañía.

Rimac saltó a la fama hace unos años con su primera creación, el Concept One, y desde entonces se ha labrado una merecida fama por sus avanzados desarrollos, que le han permitido establecer asociaciones con Aston Martin, Hyundai, Koenigsegg, Pininfarina y Porsche. Esta última empresa se ha convertido en uno de sus principales accionistas, pues actualmente cuenta con una participación del 24%.

Con la ayuda de su socio alemán, Rimac planea salir a bolsa el año que viene. Aunque todavía no hay confirmación oficial por parte de ninguna de las dos empresas, un informe señala que el propio Mate Rimac estima que la compañía tendrá una valoración de unos 5.000 millones de euros una vez comience a cotizar en los mercados bursátiles.

En paralelo, numerosos rumores señalan que dentro de poco la histórica marca francesa Bugatti, propiedad del Grupo Volkswagen, pasará a formar parte de una empresa conjunta controlada por Rimac (55%) y Porsche (45%). Aparentemente, los consejos de supervisión ya habrían dado su consentimiento a esta operación, en la que ambos integrantes llevan mucho tiempo trabajando.

El objetivo final sería transformar Bugatti, que lleva quince años confiando en un monstruoso motor W16 cuatriturbo para impulsar a sus modelos, en un fabricante de hiperdeportivos eléctricos. No en vano, la histórica firma francesa siempre ha sido considerada como el escaparate tecnológico del Grupo Volkswagen, y actualmente la vanguardia de la industria se encuentra en la electrificación, no en los propulsores térmicos.

La transición de Bugatti tendrá lugar entre los años 2023 y 2024. Aunque durante un tiempo la compañía seguirá vendiendo el Chiron y sus numerosos derivados (en los últimos años Bugatti se ha enfocado en la creación de series limitadas y one-offs para mejorar la rentabilidad de su negocio), ya prepara su próxima generación de hiperdeportivos electrificados.

A pesar de que Porsche quería que el primer Bugatti de la nueva era fuera 100% eléctrico, Mate Rimac ha preferido que sea híbrido enchufable para que así sirva de conexión entre el pasado y el futuro de la marca. Más adelante se añadirán modelos 100% eléctricos, los cuales se beneficiarán del savoir-faire de Rimac y Porsche para convertirse de nuevo en la cima de la industria automovilística mundial.

Fuente | Automobilwoche

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