No está siendo un inicio fácil para los fabricantes occidentales. Las dificultades con los componentes como semiconductors o baterías, se han visto agravados por los problemas en China con el coronavirus. Una combinación que en el caso de BMW ha provocado que en el primer semestre las ventas hayan bajado un 13%. Pero las buenas noticas es que las matriculaciones de coches eléctricos están permitiendo amortiguar la caída gracias a su fuerte crecimiento.
Durante los primeros seis meses del año, el Grupo BMW ha visto como sus ventas mundiales llegaban a las 1.160.443 unidades, incluyendo las matriculaciones de BMW, MINI y Rolls-Royce. Algo que representa un descenso del 13.3% respecto al mismo periodo del pasado año.
Por otro lado, durante el primer semestre el grupo alemán vendió un total de 75.891 coches eléctricos puros (BEV) de las marcas BMW y MINI en todo el mundo, más del doble de las ventas de los seis primeros meses del pasado año (+110,3 por ciento) y que representa el 6.55% del total de ventas del grupo.
Este crecimiento permite reforzar el proyecto de transformación que ha comenzado BMW hacia la movilidad eléctrica y además, confirma el alto nivel de demanda que existe de los coches eléctricos entre los clientes de BMW en todo el mundo, y además pavimenta el objetivo de lograr duplicar las ventas durante este 2022.
Para lograrlo BMW compañía reforzará la gama ampliando la oferta de modelos eléctricos. Por ejemplo, este año llegará el nuevo BMW i3, que será una berlina de momento solo a la venta en China, el SUV compacto iX1 y la berlina representativa i7, cuya producción ha comenzado el pasado 1 de este mes de julio en la planta de BMW en Dingolfing.
Posteriormente, ya en 2023, llegarán el esperado BMW i5, el MINI Countryman eléctrico y el Rolls-Royce Spectre. Una avanzadilla de una expansión de la oferta eléctrica que se extenderá de forma imparable por la gama con la que BMW se ha marcado el objetivo de tener más de dos millones de vehículos totalmente eléctricos en las carreteras para finales de 2025.
Nueva plataforma a mediados de la década
Hacia el 2025, BMW lanzará la nueva plataforma «Neue Klasse» optimizada para trenes motrices eléctricos, con la que el grupo quiere que el coche eléctrico ocupe al menos el 50% de las ventas totales para 2030. Una fecha que a la vista de la evolución parece claro que se logrará bastante antes.
Como ejemplo, para finales de la década Mini será 100% eléctrica, lo mismo que Rolls Royce. Dos marcas que tendrán en el coche eléctrico el salvavidas que les permita continuar e incluso incrementar sus ventas globales.
Fuente | BMW
