DeLorean ha sido demandada. Karma dice que cuatro ex empleados usaron su propiedad intelectual para el Alpha5
Un tribunal federal de Houston (Texas, EEUU) ha registrado una solicitud de demanda de Karma Automotive, la empresa de Wanxiang Group que se quedó con los restos de Fisker Automotive tras su bancarrota, contra DeLorean Motors Reimagined y cuatro de sus altos directivos. La demanda argumenta que se ha usado su propiedad intelectual para la nueva aventura empresarial de DeLorean, el Alpha5. Este coche será presentado próximamente al público.
La historia tiene su miga, y para entenderla hay que remontarse a 1980, cuando un ex directivo de General Motors, John DeLorean, empezó a fabricar en Irlanda del Norte un coupé deportivo que desafió pretendía desafiar a los grandes fabricantes, el DeLorean DMC-12. Tuvo muchos problemas productivos y financieros, no llegó a fabricarse ni dos años, y la empresa se fue a la quiebra y John a la cárcel por tráfico de drogas. Después, la película «Regreso al Futuro» (1986) inmortalizó al casi desconocido coupé de acero inoxidable.
En 1995, el inglés Stephen Wynne adquirió lo que quedaba de la difunta DeLorean Motor Company (DMC), incluyendo un abundante stock de piezas, así como los derechos de la marca. Montó un negocio de restauración y mantenimiento de estos coches, cuya valoración fue subiendo por el estatus de icono adquirido gracias a la película. Estableció su negocio en Houston, también en Texas, ya que la mayoría de los DMC-12 acabaron en Estados Unidos.
Damos otro salto hacia delante hasta que Fisker Automotive, cofundada en 2007 por Henrik Fisker, ingeniero y diseñador, puso a la venta el híbrido enchufable Fisker Karma en 2011, que fue muy revolucionario en su día. Nuevamente hablamos de un fracaso en pocos años, entre los problemas con el proveedor de las baterías, A123 Systems, llamadas a revisión e incluso una enorme tormenta con huracán (Sandy) aguaron la fiesta a Henrik. Su empresa también se fue al cuerno.
El grupo chino Wanxiang recuperó lo que quedaba de Fisker Automotive y pasó a llamarse Karma Automotive, que desde 2014 ha intentado colocar en el mercado el Fisker Karma renombrado como Karma Revero GT (hoy día GS-6). A su vez, Henrik Fisker fundó otra empresa, Fisker Inc., que es la que traerá a la vida -si todo sale bien- el Fisker Ocean a partir de noviembre, y más adelante el PEAR. Pero volvamos a Wanxiang.
Los intentos de los chinos de reflotar el legado del Fisker Karma, que ya tiene sus añitos, han sido un fiasco. En uno de sus intentos por facturar algo, estuvieron en contacto en 2020 con Stephen Wynne para hacer conjuntamente réplicas funcionales del DMC-12 pero con motores eléctricos y baterías; esto se ha intentado antes, sin éxito. El proyecto secreto para tal fin, denominado «Project 88», fue asignado a Joost de Vries, Alan Yuan, Troy Beetz y Neilo Harris, todos empleados de Karma Automotive.
De un proyecto a una nueva firma de automóviles, DeLorean Motors Reimagined
Estos cuatro empleados tenían que lograr meter las tripas eléctricas de Karma dentro de la cáscara del viejo DeLorean. A partir de este punto hay dos visiones. La de los cuatro empleados es que se vieron incapaces de avanzar en el proyecto, dadas las problemáticas financieras de Karma Automotive, y acabaron hartándose y abandonando la empresa para formar DeLorean Motors Reimagined con la bendición de Stephen Wynne.
La versión de Karma Automotive dice que los empleados del «Project 88» no eran claros sobre sus avances en el proyecto, había ambigüedades, y que decidieron aprovecharse de la tecnología y saber hacer de Karma Automotive para montar su propia empresa, lo cual es ilegal. Esta versión estaría apoyada, supuestamente, por correos electrónicos a los que Karma Automotive ha tenido acceso -seguramente correos internos-.
Según la demanda, el 22 de diciembre de 2020, Alan Yuan le dijo en un email a Joost de Vries: «Vamos a empezar a negociar por nuestra cuenta»; Yuan no le veía futuro al proyecto dentro de Karma. En febrero de 2021 de Vries mandó otro email a Troy Beetz con una presentación PowerPoint acerca de una nueva empresa para presentarla a inversores. En junio de 2021 otra presentación nombraba a de Vries, Yuan y Beetz como fundadores de una nueva empresa. Seguían trabajando todos en Karma Automotive.
En agosto de 2021, Karma Automotive dice tener documentada la salida de información de su empresa hacia cuentas de correo personales de los acusados, y que estos ya estaban haciendo contactos con el exterior sobre la nueva empresa. Entre la información había datos sobre tecnología de baterías, sistema de recarga, el tamaño del coche e incluso sus primeras imágenes en 3D. No hablamos de una réplica de un DMC-12, sino un coche nuevo inspirado -de lejos- en el DMC-12.
Entre agosto de 2021 y febrero de 2022 los cuatro demandados abandonaron Karma Automotive. En la nueva empresa, sus cargos son los siguientes: Joost de Vries es el consejero delegado (CEO), Alan Yuan el director de operaciones (COO), Troy Beetz el director de marketing, y Neilo Harris el vicepresidente. Stephen Wynne es miembro del consejo de administración. Si realmente usaron el correo corporativo de Karma Automotive para sacar información secreta de la empresa, demostrarían ser unos completos imbéciles y analfabetos digitales, porque todo eso deja rastro.
El DeLorean Alpha5 es motivo de discordia
DeLorean Motors Reimagined se estableció en noviembre de 2021 en San Antonio, también en Texas, motivado por dos montantes de ayudas económicas de 500.000 dólares cada uno, por parte del ayuntamiento y el condado de Bexar, ligados a objetivos de contratación (450 personas) y de rendimiento empresarial. Ambas autoridades no han soltado/perdonado un solo dolar a la empresa. Como todo está en Texas, de ahí que la demanda corresponda al tribunal federal de Houston, es el competente en esta materia.
En enero de este año, antes del fin de semana de la final de la Super Bowl, se liberó un teaser de un coche que acabó siendo el Alpha5, mostrado como imágenes generadas por ordenador en Internet y TV. Según de Vries, el Alpha5 se ha diseñado íntegramente fuera de Karma y que es un modelo sin relación con una réplica de bajo volumen a partir de un coche diseñado a finales de los años 70. Que la acusación de Karma Automotive es infundada, dice.
«Este coche [Alpha5] tiene un linaje muy específico que nada tiene que ver con Karma Automotive desde el punto de vista del diseño, ingeniería, cadena de suministro o manufactura.»
Joost de Vries, CEO de DeLorean Motors Reimagined
Según de Vries, en diciembre de 2021 ya estaba terminada la mayoría del trabajo de ingeniería del Alpha5 y la financiación necesaria. Teniendo en cuenta los tiempos que se suelen manejar en la industria del automóvil, han diseñado ese coche fuera de Karma Automotive a una velocidad comparable a la de Speedy González o el Correcaminos.
Las partes implicadas se verán las caras en un tribunal federal si no llegan antes a un acuerdo. Resumiendo, o Karma Automotive se inventa parte o todo de esta historia a ver si trinca unos millones de dólares, o el cuarteto de ex empleados le echaron más cara que espalda y abusaron de su anterior empresa sin haber puesto un solo centavo en compensación. Agarrad palomitas para el próximo episodio.
Vuelta extra: en noviembre de 2020 Karma Automotive también demandó a Lordstown Motors por infracción de propiedad intelectual. Este protofabricante había comprado una planta en Ohio a General Motors y para recuperar pasta se la ha revendido a Foxconn este año, que será el que fabrique el Fisker PEAR en Estados Unidos en 2024. Y un puñado de ex directivos de GM pretendieron vender al goteo cascarones del Fisker Karma con motores V8, el VLF Destino. Parece que hablamos de una pedanía de Murcia en la que todos se conocen.
Fuente | San Antonio Express-News