Los expertos coinciden en que conseguir un sistema de producción eléctrica donde las renovables sean las principales protagonistas no es un objetivo que se enfrente a retos imposibles. Ahora el Laboratorio Nacional de Energía Renovable (NREL) dependiente del Departamento de Energía de Estados Unidos, ha publicado un informe donde indica el camino para lograr alcanzar el 100% de renovables es el mercado americano.
Y es que como recordamos, los Estados Unidos están muy por detrás de Europa en implantación de energías limpias. Por ejemplo, en 2021 la cuota de las renovables apenas llegó al 21%. Muy lejos de los estados líderes en Europa, entre los que está España con un 46.7%.
A pesar de esto, desde NREL son optimistas en que con una fuerte inversión se puedan lograr cumplir los objetivos de implantación de renovables en el país y que pavimentarán el cambio radical del actual panorama hasta llegar a rozar el 100% de producción en 2035.
La conclusión de su último informe es que lograr llegar al 90% de mix eléctrico con renovables no será complicado e incluso que tendrá «un coste incremental bajo». Una implantación donde las protagonistas serán la energía eólica, la solar, el almacenamiento por baterías y bombeo, además de una mejora de la transmisión.
Sin embargo, desde el informe avisan de que el último 10% presentará desafíos, tanto financieros, como también tecnológicos y que requerirán investigación y nuevas tecnologías.
El laboratorio señala cuatro «obstáculos críticos» para alcanzar el 100 %:
- Dramática aceleración de la electrificación y mayor eficiencia en la demanda
- Nueva infraestructura energética instalada rápidamente en todo el país
- Ampliación de las cadenas de suministro y fabricación con energía limpia
- Soporte continuo de investigación, desarrollo, demostración e implementación para llevar tecnologías emergentes al mercado
En todos sus escenarios las grandes protagonistas para lograr un sistema más limpio y además capaz de producir energía más económica están dominados por la solar y la eólica, que proporcionarán la mayor parte de la generación (entre el 60% y el 80%).
Para 2030, la energía solar requerirá añadir en torno a los 40 GWac a 90 GWac por año, mientras que la energía eólica requerirá que se instalen de 70 GW a 150 GW por año. Para 2035, Estados Unidos deberá haber añadido 2 TW de energía eólica y solar combinadas si quiere alcanzar sus objetivos de descarbonización. Otros retos que necesitarán una fuerte inversión será el despliegue de 5 a 8 GW de producción hidroeléctrica, de 3 a 5 GW de geotermia, y entre 120 a 350 GWh de almacenamiento en baterías.
Para alcanzar estos objetivos, Estados Unidos tendrá que enfrentarse a una factura que desde ENREL estiman ascenderá a entre 330.000 y 740.000 millones de dólares para el periodo 2022-2035. Una cifra que no parece demasiado elevada si la comparamos por ejemplo con los más de 800.000 millones de dólares que cada año se gasta el país en su ejército.
Pero esto vendrá acompañado de efectos positivos entre los que destacan la reducción de emisiones, la bajada del coste de la energía, pero también una fuerte creación de empleo cualificado en la instalación y mantenimiento de las nuevas instalaciones. Así lo indica un reciente informe de la American Clean Power Association, que ha estimado que en los próximos 8 años se podrán crear entre 500.000 y 600.000 nuevos empleos en industrias como la solar, la eólica y de almacenamiento en baterías.
Un reto que como vemos, permitirá sin demasiadas dificultades más allá de la enorme inversión, lograr que el 90% de la producción sea con renovables en apenas 12 años en un país que tiene por delante un camino más largo y complejo que una Europa donde hemos empezado a hacer los deberes mucho antes, lo que debería traducirse en unos plazos más cortos y una inversión menor para lograr desplazar definitivamente a los combustibles fósiles de la producción en una década.
Fuente | NREL