Desde hace años, Toyota ha sido una férrea defensora de su estrategia de descarbonización multitech, apostando por una amplia variedad de soluciones para reducir el impacto climático de sus vehículos: híbridos, híbridos enchufables, eléctricos a baterías, eléctricos con pila de combustible de hidrógeno y motores de combustión interna alimentados por combustibles sintéticos o hidrógeno.
Akio Toyoda, presidente de la compañía, ha insistido en una reciente rueda de prensa que una «mayoría silenciosa» de la industria no tiene claro que los coches eléctricos a baterías vayan a ser la única solución viable para alcanzar la neutralidad de carbono, haciendo hincapié en que el enfoque multienergía de Toyota es el camino adecuado.
«Las personas involucradas en la industria automotriz son en gran medida una mayoría silenciosa. Esa mayoría silenciosa se pregunta si realmente está bien tener los vehículos eléctricos como única opción. Pero creen que es la tendencia, por lo que no pueden decirlo en voz alta», ha sentenciado el directivo en unas declaraciones al Wall Street Journal. «Debido a que la respuesta correcta aún no está clara, no debemos limitarnos a una sola opción».
«Creo que debemos ser realistas acerca de cuándo la sociedad podrá adoptar por completo los vehículos eléctricos a baterías y cuándo nuestra infraestructura podrá soportarlos a escala. Porque, igual que los automóviles totalmente autónomos que se suponía que todos deberíamos conducir ahora, creo que los eléctricos a baterías tardarán más en convertirse en la corriente principal de lo que a los medios les gustaría que creamos«.
Toyota está rediseñando su estrategia de electrificación
«Francamente, los eléctricos a baterías no son la única forma de lograr los objetivos de neutralidad de carbono. Personalmente, prefiero buscar todas las opciones, no solo una, como combustibles sintéticos libres de emisiones e hidrógeno. Sigo creyendo que el hidrógeno es una tecnología tan prometedora para nuestro futuro como los eléctricos a baterías».
A pesar de la aparente convicción de Toyoda, varios informes señalan que Toyota se encuentra trabajando en un plan de electrificación más ambicioso que le permita recortar distancias con BYD y Tesla, actuales líderes del sector. Entre otras cosas, está planteándose abandonar la arquitectura e-TNGA antes de tiempo para crear una nueva plataforma dedicada que le permita simplificar al máximo el proceso de fabricación.
La e-TNGA fue desarrollada para compartir línea de producción con modelos térmicos, una estrategia que tenía sentido cuando Toyota calculaba que para 2030 vendería alrededor de 3,5 millones de coches eléctricos al año; es decir, un tercio de su volumen total. Al ritmo de crecimiento actual, este porcentaje podría superar ampliamente el 50%.
Fuente | Wall Street Journal
