NIO detalla sus planes de expansión en Europa en 2022, también con estaciones de intercambio de baterías

Noruega fue la cabeza de playa para la invasión entrada de NIO en el Viejo Continente. Es un mercado pequeño pero con las mayores facilidades para el crecimiento de una marca que solo tiene coches eléctricos. Después de Noruega se anunciaron otros mercados, esto ya se sabía. Primero llegará el ET7, y a partir de 2023 llegará el más económico NIO ET5. Tenemos algo más de información esta vez.

A lo largo de este año la marca china estará presente en los mercados de Alemania, Holanda, Suecia y Dinamarca, tanto a nivel de concesionarios como «holísticamente», es decir, que cubra el abanico de necesidades de sus clientes. De aquí a tres años NIO tendrá presencia en 25 países y regiones mundiales, entre los que cabe incluir también a España. Es lógico que se prioricen mercados donde la electromovilidad pega más fuerte y la renta per cápita es más alta.

El fundador/CEO de NIO, William Li, declaró: «El año 2021 está lleno de desafíos. Con una actitud y perspectiva positiva y optimista, NIO ha crecido junto a sus clientes. En 2022 continuaremos apostando por el desarrollo de productos y tecnología, acelerar el despliegue de nuestra red de servicio, y entrar en nuevos mercados mundiales. Tenemos confianza en el camino que tenemos por delante».

Hay una diferencia entre el mercado noruego y los países de la UE donde NIO va a desplegarse, y es que el SUV ES8 solo se ofrecerá allí. Para los mercados UE la apuesta comercial es con los sedanes, primero ET7 y después ET5, además de los SUV de menor tamaño. Lo que sí que habrá en común son las estaciones de intercambio de baterías. Noruega vio abrir la primera este mismo año, la primera fuera de China. A finales de año tendrán 20 estaciones. Más del 90% de los clientes han comprado los ES8 con baterías en régimen de alquiler.

El siguiente hito, de acuerdo al plan, es instalarlas en Alemania. Ahora mismo NIO no podría hacer un gran despliegue de estaciones de intercambio de baterías de forma eficiente, por eso ayer firmó un acuerdo de colaboración con la Corporación de Importación y Exportación Técnica Nacional de China (CNTIC).

Esta empresa estatal china puede importar/exportar fábricas enteras, y opera en 100 países. Con su ayuda, NIO puede acelerar el despliegue de las estaciones de intercambio principalmente en Europa. De momento NIO no tiene presencia comercial en otros continentes fuera de China. Después de Europa, el objetivo evidente es Estados Unidos, seguramente California en primer lugar, donde ya están fichando personal.

Como ya os explicamos en un artículo anterior, el sistema de intercambio de baterías de NIO se paga mediante una suscripción mensual, aunque el precio del coche es inferior al no ser las baterías «suyas». Es posible reducir la cuota mensual llevando menos baterías, y en ocasiones especiales poder arrendar más capacidad. Los intercambios de baterías permiten que un NIO esté «repostado» en menos de 5 minutos. Lógicamente, también aceptan recarga rápida. Shell colaborará con NIO en este despliegue.

Para cuando España sea un mercado de NIO, se presupone cierto despliegue de la red de intercambio de baterías. Esto permitirá a la clientela de NIO -y de momento, exclusivamente- moverse por Europa con una facilidad y conveniencia nada lejana a la de Tesla, que está sembrando una infraestructura de recarga de alta potencia -supercargadores- que han cambiado la experiencia de conducción de larga distancia con coches eléctricos. En teoría, una estación de intercambio NIO puede hacer más de 300 intercambios al día y disponen de cargadores ultrarrápidos de 150 kW.

En definitiva, la intención de NIO es que su clientela tenga la misma facilidad para tener un coche eléctrico que si fuese térmico, aunque eso nunca puede lograrse al 100%. En 2025 NIO tendrá 4.000 estaciones de intercambio en China y 1.000 en el extranjero. Muy buena parte de ellas estarán en Europa. En su mercado natal NIO está teniendo muy buena acogida de su servicio de intercambio de baterías, el cual va a razón de un millón de intercambios trimestrales, y subiendo.