NIO alcanza los 4 millones de intercambios de baterías, casi a razón del millón trimestral
4 min. lectura
Publicado: 01/10/2021 20:21
«¿Eso del intercambio de baterías funciona?» A NIO desde luego que sí. Llevando la contraria a la industria, donde todos creen que es preferible poder recargar rápido o tener mucha capacidad de baterías, el fabricante chino sigue fiel a una vieja idea que no se puso bien en práctica. Y a un buen ritmo, además.
Casi 10 años después de que conociésemos la iniciativa de Better Place con Renault, NIO ha anunciado que se han superado los cuatro millones de intercambios de baterías. Concretamente, ocurrió el 29 de septiembre. Actualmente hay en marcha 504 estaciones NIO Power Swap, muy por delante de lo que habían previsto, que era tener el medio millar a finales del año.
«Cargue a tope en lo que dura una canción», podemos leer en la imagen incrustada del tuit enlazado a continuación. El intercambio de baterías sigue siendo más rápido que el mejor sistema de recarga ultrarrápida. Un operario introduce el coche marcha atrás en la estación robotizada, retira las baterías y coloca otras totalmente cargadas en su lugar. Al menos, esta modalidad da trabajo a alguien in situ.
Pero no solamente interesan las cifras, sino su progresión. A comienzos del trimestre pasado supimos que tenían 301 estaciones de intercambio de baterías. El objetivo es llegar a 2025 con 4.000 estaciones, de las que 1.000 no estarán en China. Las primeras en Europa estarán en Noruega para dar servicio a los primeros clientes de esta zona del mundo.
El proceso se facilita con aplicación móvil, se puede conocer cuántas baterías hay disponibles en cada estación Power Swap. El servicio es gratuito, solo se paga por el neto (la energía que se recibe menos la que se entrega)
En cuanto al número de intercambios, hace seis meses dijeron que eran dos millones de intercambios, hace tres meses rozaron los tres millones, y ahora dicen que cuatro. Grosso modo, hacen más de 330.000 intercambios de baterías al mes. Se trata de una solución propietaria y que solo sirve para NIO, pero es significativo el nivel de utilización de estas estaciones. Eso hace que rentabilizarlas sea más fácil, ya que sus costes fijos son importantes.
Exceptuando el caso de éxito de NIO, según sus cifras, pocas iniciativas hay en este sentido. Podemos citar a Ample, startup californiana que trabaja en un sistema universal de intercambio de baterías. Pero eso no tiene mucho sentido si los propios fabricantes no hacen sus coches pensando en ello, así que para universalizarlo habría que realizar adaptaciones previas.