Los mecánicos sentenciados por el coche eléctrico. En 2030, la mitad de los talleres cerrarán
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Publicado: 16/08/2023 08:00
La menor dependencia de los coches eléctricos de los mantenimientos y las reparaciones, sumado a las dificultades de los talleres independientes para actualizarse, supondrá que en muy pocos años miles de establecimientos independientes tendrán que echar el cierre por la falta de trabajo.
Las cifras son bastante alarmantes para el sector, que ha visto como la prohibición de ventas de coches con motor de combustión han marcado el principio del fin de su actividad tal como la conocemos. Pero este final podría llegar mucho antes para muchos.
Así lo indican los profesionales británicos, que en declaraciones al diario The Sun, han criticado el movimiento de su gobierno al desmarcarse de la UE lanzado un ambicioso proyecto para terminar con las ventas de nuevos coches con motor de combustión cinco años antes que en Europa. En 2030.
Esto se suma a otros factores, como las dificultades que los talleres están teniendo a la hora de adaptarse a la nueva realidad del coche eléctrico, que exige realizar nuevos cursos de capacitación. Pero las estadísticas son evidentes, y según los datos, apenas uno de cada cinco mecánicos en países como Reino Unido están preparados para atender las necesidades mecánicas de un coche eléctrico.
Añadir que muchos de estos talleres independientes se quejan de que las marcas no son transparentes a la hora de acceder a los recursos necesarios para realizar algunas reparaciones, a lo que se añade también el coste de todo el material necesario para completar los mantenimientos.
Todo esto obligará a los talleres a realizar inversiones en actualizar tanto los conocimientos de su plantilla, con un coste estimado de unas 8.000 libras por empleado, así como también adecuar sus instalaciones.
Ante este panorama, muchos profesionales ya advierten de que los usuarios también sufrirán las consecuencias, ya que según indican «los vehículos eléctricos requieren menos mantenimiento que los automóviles de gasolina o diésel , pero si se estropean, es muy costoso repararlos”.
Un sector que estiman, perderá el 50% de sus talleres en los próximos seis años, lo que tendrá como consecuencia que las marcas verán como se pierde una competencia directa y cercana en cuanto a mantenimientos. Y con menos competencia, podemos esperar precios más altos para todos.