¿Quieres estar informado diariamente con las últimas novedades del mundo del motor?

Ahora no Permitir

El Volkswagen Golf cumple 50 años: esto es todo lo que sabemos de su 9ª generación, que será exclusivamente eléctrica

El Volkswagen Golf cumplía a finales de la semana pasada 50 años. Coincidiendo con esta importante fecha, la octava generación del célebre compacto alemán, todo un icono de la industria europea y uno de los automóviles más populares del viejo continente durante las últimas décadas, ha recibido su restyling de mitad de vida.

El conocido como Golf 8.5 será el último integrante de la saga con motores de combustión interna, pues Volkswagen ha confirmado que su novena generación será exclusivamente eléctrica. Previsto para 2028, sustituirá de un plumazo tanto al Golf actual como al ID.3, que será discontinuado debido a la tibia acogida de la gama cero emisiones ID.

Al contrario que el ID.3, que es de tracción trasera, el próximo Golf será de tracción delantera. Esta configuración no sólo conllevará unos menores costes de producción, sino que también aligerará notablemente el vehículo, solucionando con ello uno de los puntos débiles de su predecesor, que pesa unos 200 kg más que rivales como el Renault Mégane E-TECH.

Las variantes GTI dispondrán de un diferencial de bloqueo electromecánico VAQ, un elemento que permitirá al eje delantero digerir mejor el extra de potencia. Por supuesto, no faltarán versiones con tracción total 4MOTION gracias a la adición de un segundo motor en el eje trasero. El tope de gama seguirá siendo el modelo R.

Volkswagen ID.3 GTX

El Volkswagen Golf eléctrico será más barato de fabricar que el ID.3

El Golf será uno de los primeros coches eléctricos del Grupo Volkswagen en hacer uso de la plataforma modular SSP, una arquitectura de gran flexibilidad que incluirá un sistema de 800 voltios, lo que posibilitará cargas de apenas 12 minutos (10-80%).

Teniendo en cuenta que el ID.3 GTX anuncia una autonomía de 600 km WLTP, no sería de extrañar que los Golf más capaces ronden los 700 km WLTP; no en vano, esta es la cifra a la que Volkswagen aspira a llegar con el crossover Trinity, que empleará la misma plataforma.

Para abaratar el proceso de producción, que se llevará a cabo en Wolfsburgo (Alemania), se apostará por el uso de gigacastings. El hardware estará prácticamente estandarizado en toda la gama: los clientes podrán elegir el color de la carrocería, el diseño de las llantas y la motorización (nivel de potencia y capacidad de la batería). El resto de opciones de personalización se realizarán mediante actualizaciones de software (su arquitectura electrónica será la 2.0 de CARIAD, compatible con sistemas de conducción autónoma de nivel 2+ y más adelante 4).

Compártelo: Compartir en WhatsApp Compartir en Menéame