
Zeekr y Xpeng lanzarán este año su sistema de conducción autónoma de Nivel 3
La conducción autónoma se ha convertido en el gran objetivo de los fabricantes chinos, que han visto como la demanda de los clientes de esta tecnología no hace más que aumentar y que es parte fundamental de unos próximos lanzamientos que subirán el nivel.

Los fabricantes chinos de automóviles eléctricos Zeekr y Xpeng han anunciado que comenzarán a vender coches equipados con tecnología que permitirá a los conductores retirar las manos del volante, lo que pone sobre la mesa la ferocidad de la competencia en China, donde la conducción autónoma se ha convertido en un imprescindible.
Ambas compañías, junto con GAC, han confirmado que lanzarán este año modelos con tecnología de conducción autónoma de Nivel 3, lo que supone un avance significativo en un sector dominado hasta ahora por sistemas de nivel 2 (L2).
Llega la conducción autónoma real

Zeekr ha anunciado que presentará oficialmente su Zeekr 9X con esta tecnología en el Salón del Automóvil de Shanghái en abril, y comenzará las entregas en la segunda mitad de 2025. Por su parte, Xpeng ha informado en una conferencia con analistas que alcanzará capacidades de Nivel 3 en la segunda mitad de este año y que en 2026 empezará a producir en masa modelos con tecnología lista para el Nivel 4 (L4).
Mientras tanto, GAC ha confirmado que comenzará a vender modelos con capacidad para L3 en 2025 y que también está trabajando en vehículos con tecnología L4, según informaciones de medios locales.
El futuro de la conducción autónoma en China

Como recordamos, la industria ha definido cinco niveles de conducción autónoma, que van desde el control de crucero en nivel 1, el más básico, hasta la conducción totalmente autónoma en nivel 5. El Nivel 3 significa que los coches pueden circular sin supervisión humana durante periodos prolongados, aunque el conductor debe estar preparado para retomar el control en cualquier momento. Hasta ahora, esta tecnología solo se ha utilizado en pruebas piloto y en determinadas vías.
En junio del año pasado, China permitió a un primer grupo de nueve fabricantes, incluidos BYD y Nio, realizar pruebas de vehículos con tecnología L3 en vías públicas, un paso fundamental para la aprobación regulatoria de estos modelos para su comercialización.
Este anuncio refleja cómo la feroz guerra de precios en China, el mayor mercado automovilístico del mundo, está evolucionando hacia una competencia basada en la tecnología.

Anteriormente, la conducción autónoma era una característica reservada a los coches premium, pero el gigante BYD anunció recientemente que la incluirá en la mayoría de sus modelos sin coste adicional, lo que ha obligado a otras marcas a seguir su ejemplo.
Según la legislación china, los fabricantes serán responsables de los accidentes de tráfico en caso de fallos en los sistemas de Nivel 3, mientras que los conductores seguirán obligados a mantener la atención constante en los vehículos con tecnología L2, como el sistema Full Self-Driving de Tesla.
El CEO de Zeekr ha asegurado que el SUV 9X estará equipado con nada menos que cinco sensores Lidar y un ordenador impulsado por dos chips Nvidia Thor. Aunque esto aumentará significativamente los costes de producción, pero desde la marca se ha enfatizado que es una medida necesaria para garantizar la seguridad en los sistemas de Nivel 3, que será una de las principales bazas de venta de sus próximos lanzamientos.
Con estos avances, la industria china se posiciona en la cabeza de la conducción autónoma, que ya domina en aspectos como los costes y el volumen de producción, y que ahora va camino también de abarcar otros aspectos, como el diseño, calidad, y tecnología.