Para aprobar el carnet de conducir, es imprescindible conocer las diferencias existentes entre tres términos que nos pueden parecer sinónimos, pero que en realidad no lo son. Te contamos qué es detención, parada y estacionamiento.
Todo el mundo sabe lo que es aparcar y no se plantea que pueda haber matices que determinen ciertos aspectos relevantes de la conducción. Pero lo cierto es que así es, ya que incluso el Reglamento General de la Circulación establece diferentes señales que nos indican una cosa u otra en función de lo que tengamos intención de hacer.
Hablamos de las diferencias entre detención, parada y estacionamiento. Y es que, en muchas ocasiones, una de estas maniobras puede estar prohibida, pero no las otras.
Qué es una detención
Una detención es cuando un vehículo se detiene temporalmente en el tráfico para permitir que otro vehículo salga de una entrada o cruce una calle.
Esto puede suceder por razones de señalización o preferencia de paso, como por ejemplo un STOP o un CEDA EL PASO. Pero también por cuestiones de emergencia, como permitir el paso a una ambulancia, camión de bomberos, etc, o por un atasco, accidente u otras cuestiones temporales.
En este caso, el conductor y los ocupantes no deben salir del vehículo y el primero debe reemprender la marcha en cuanto sea posible.
Qué es una parada
Una parada es cuando un vehículo se detiene temporalmente en un lugar designado para dejar o recoger pasajeros, como en una parada de autobús, o para cargar o descargar mercancía.
En cualquier caso, una parada siempre debe durar menos de dos minutos y el conductor no debe abandonar el vehículo. Es algo que se puede hacer a los lados de la vía, incluso en zonas restringidas como los espacios reservados a carga y descarga.
Eso sí, siempre y cuando sean lugares con visibilidad, ya que no está permitido realizar una parada en cambios de rasante, túneles, curvas, pasos para ciclistas y peatones, giros estrechos y, en general, lugares en los que la visibilidad sea reducida, las señales queden tapadas o se genere un peligro innecesario.
Qué es un estacionamiento
El estacionamiento es cuando un vehículo se deja aparcado por un período de tiempo superior a dos minutos. En este caso, el conductor puede abandonar el vehículo por tiempo indefinido.
Esta maniobra se produce en plazas de aparcamiento habilitadas a tal efecto, situadas junto a las aceras, en parkings, etc. Independientemente de si hay una señal o no, el estacionamiento nunca se puede realizar de modo que obstaculice el tráfico o ponga en peligro la seguridad vial.
Diferencia entre detenerse, parar y estacionar
A modo de resumen, podemos decir que nos detenemos cuando el tráfico, la señalización o las circunstancias nos obligan a detenernos temporalmente.
Y, cuando tenemos intención de aparcar a un lado de la vía, paramos si la maniobra dura menos de dos minutos y no tenemos intención de abandonar el vehículo. En cambio, estacionamos si lo hacemos durante más tiempo y tenemos libertad para abandonar el automóvil.
Señales de prohibido parar o estacionar
El Reglamento General de la Circulación establece señalización específica para cada tipo de maniobra, de modo que el conductor sepa qué puede hacer y qué no en cada lugar.
Estas seis señales indican los lugares en los que está prohibido parar y estacionar (1), o estacionar en cualquier circunstancia (2). Además, las cuatro siguientes indican circunstancias específicas en las que no está permitido estacionar.
Finalmente, existe otra señal que también limita el estacionamiento. Se trata de la señal de prohibido estacionar insertada en un panel de fondo blando con borde negro. En este caso, indica el inicio de una zona de estacionamiento limitado, como puede ser una de pago por estacionar o en la que sólo es posible hacerlo durante un tiempo máximo.
