Ya nos hemos acostumbrado a que los fabricantes exageren la eficiencia de sus coches. Consumos imposibles, autonomías de ciencia ficción, cosas que parece mentira que no tengan más repercusión.
Pero en China parece que no se lo están tomando tan a la ligera. Al menos es lo que está viviendo el fabricante chino BYD, que entre los días 6 y 24 de junio ha recibido un total de 25 denuncias por parte de unos clientes que alegan que la autonomía del BYD Quin no se acerca a la declarada por el fabricante.
Como recordamos, el BYD Qin es una de las apuestas de BYD, de momento sólo para mercados como el chino. Un eléctrico con extensor de autonomía que supone una evolución de su primer intento, el F3DM de fugaz paso por el mercado europeo.
En su interior encontramos una pequeña batería de 13 kWh, que según el fabricante le permite alcanzar una autonomía media de 70 kilómetros en modo 100% eléctrico. Una cantidad realmente optimista que como siempre, se ha tomado en unas condiciones óptimas.
De momento no sabemos cual es la cifra real que está provocando estas denuncias que amenazan con frenar unas ventas que habían despuntado en el primer semestre del año, donde el Qin ha logrado hacerse con un 27.9% del mercado de coches eléctricos chino, y un 49.6% de los modelos híbridos enchufables.
Lo que está claro es que los diferentes ciclos de consumo son un verdadero cachondeo, especial mención para los ciclos europeo y japonés, que una de dos, o ignoramos optando por sistemas más reales que no todo el mundo conoce, o pasamos a la acción denunciando de forma sistemática las cifras que nos proporcionan los fabricantes.
Vía | Wantchinatimes
