Uno de los principales objetivos de los investigadores de motores eléctricos, es reducir el uso de las escasas y extremadamente costosas tierras raras. Materiales utilizados para la fabricación de elementos como los motores de los coches eléctricos, y que están principalmente en manos de China que controla entre el 70 y el 80% de la producción mundial.
Ahora un grupo de investigadores de la Universidad Commonwealth de Virginia, Estados Unidos, han publicado los primeros resultados de un trabajo que ha tenido como objetivo la sintetización de un nuevo material magnético que reducirá de forma drástica el uso de tierras raras en los futuros motores.
El nuevo material se compone de nanopartículas que contienen átomos de hierro, cobalto y de carbono, con un tamaño de dominio magnético de aproximadamente 5 nanómetros. Según los responsables del proyecto «Este diseño es capaz de almacenar información hasta 790 grados Kelvin con una buena estabilidad termal, un largo alcance que tendrá un fuerte impacto en diferentes segmentos.»[blocktext align=»left»]Ricardo desarrolla la nueva generación de motores eléctricos [/blocktext]
Los imanes permanentes, específicamente aquellos que contienen metales de tierras raras, son un componente importante utilizado por la industria de la electrónica, las comunicaciones, los generadores eólicos, y también por los fabricantes de coches eléctricos e híbridos.
Un avance que permitirá reducir la actual dependencia de China tanto de Estados Unidos como de Europa, y que permitirá bajar los costes de fabricación de múltiples elementos, entre ellos los motores eléctricos.
Fuente | VCU