Que nos quede claro. Los Tesla no conducen solos

La noticia de la primera víctima usando el sistema de Autopilot de Tesla ha dado lugar a multitud de noticias en prácticamente todos los medios de comunicación, desde medios especializados hasta tradicionales. Unas noticias que han llegado a poner en cuestión si Tesla ha ido demasiado rápido con la puesta en marcha comercial del sistema Autopilot. Algo que según el 79% de nuestros lectores, no ha sido así. 

No seré yo quien diga si esta muerte ha sido responsabilidad del Autopilot o del conductor. Para eso ya está la NHTSA, quién esclarecerá los hechos después de la investigación. Pero lo cierto es que buena parte del público general de verdad cree que «un coche que conduce solo» ha matado a una persona. A esto han contribuido buena parte de los medios de comunicación tradicionales, que en cuanto huelen el morbo se lanzan a ello. Algunos titulares: «La primera víctima fatal de un auto que se maneja solo», «Piloto automático provoca una muerte» y mi preferido, digno de película de acción americana, «Automático pero mortal».

Quizá el hecho de que Tesla le llame Autopilot (piloto automático) tampoco ayuda a este revuelo. Cuando oímos esa palabra, a todos se nos viene a la mente un coche que te lleva solo a su destino. Y cuando digo todos hablo de la mayoría del público, gente que solo ha oído hablar de Tesla alguna que otra vez. La propia compañía defiende que no se trata de un sistema de conducción autónoma, sino una simple ayuda a la conducción en fase beta que necesita de la atención del conductor por motivos de seguridad. Los cierto es que el hecho de llamarle Autopilot puede llevar a la confusión.

Los primeros indicios hablan de que el conductor iba viendo una película de Harry Potter mientras estaba a los mandos del Model S. Algo que la empresa ya ha dicho cientos de veces que no se puede hacer. Quizá sea un exceso de confianza, ya que se trataba de un conductor experimentado y aficionado de la marca, que incluso subía vídeos a su canal de Youtube. Quizá después de correr miles de kilómetros con este sistema se fiaba ciegamente de él. Un clarísimo error.

También hay que tener en cuenta la mala suerte, ya que el coche fue incapaz de detectar un camión, debido al hueco entre el eje trasero y delantero. Un hueco que ya se está poniendo en cuestión. Quizá si no hubiese existido ese hueco, o hubiese coincidido con otra parte del camión no estaríamos hablando de esto. Pero entonces tampoco estaríamos hablando de un sistema imperfecto.

Aquí tenéis el esquema del accidente, cortesía de los compañeros de Electrek. Los primeros indicios indican que la culpa fue del camión, al saltarse un cruce cuando no debía de hacerlo.

Una cosa está clara. Los Tesla no conducen solos. Hay que recordar que se trata de un sistema legalizado y que su uso es responsabilidad absoluta del conductor. Tesla no ofrece vehículos con conducción autónoma. Todo apunta a que algún día lo hará, pero ese día todavía no ha llegado.

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