Opel pierde 10.000 euros en cada Ampera-e que se vende
4 min. lectura
Publicado: 02/12/2017 12:33
Esta semana ha saltado a todos los medios la noticia de que el grupo PSA reclamaría a Opel una compensación de la mitad de la inversión realizada en su compra al General Motors. Unos 800 millones de euros que los franceses reclaman por culpa de unos motores de combustión menos eficientes de lo que Opel indicaba antes de la compra. Un verdadero duelo de trileros ya que no olvidemos que la propia PSA ha sido acusada en su momento de falsear sus cifras de emisiones.
Ahora en medio de esta extraña guerra, extraña ya que Opel ya forma parte de PSA, han salido a la luz nuevos datos que nos dan una pista de por qué Opel no ha promocionado nada el Ampera-e, e incluso parecía estar en medio de una estrategia de anti-ventas.
Según varias fuentes internas relacionadas con la operación de venta de Opel a PSA, el Ampera-e, la versión europea del Chevrolet Bolt, está siendo un desastre económico para el fabricante, con unas pérdidas de 10.000 euros por unidad vendida.
Según estas mismas fuentes «Su solución es técnicamente inviable y ha conducido a enormes pérdidas. entonces lo primero que harías es quitarlo de la oferta, pero entonces las emisiones de la flota explotarían al alza«.
Eso quiere decir que PSA se ha encontrado con dos problemas inesperados. Uno es la menor eficiencia de los motores de Opel, y otra que el modelo que más aporta en la reducción de las propias emisiones de la gama produce unas enormes pérdidas económicas. Y todo a las puertas de la entrada de las nuevas normas de reducción de emisiones en Europa, que sin duda impactarán de lleno en PSA/Opel.
Según los expertos de la consultora PA Consulting, antes de la venta, Opel estaba camino de quedar por debajo de su objetivo de reducciones de emisiones de CO2 en 3.7 gramos. Excluyendo el Ampera-e, que se esperaba alcanzase una producción de 20.000 unidades al año, la cifra de emisiones aumentará a 6 gramos. Un grave problema.
Y eso que los expertos en el sector de la automoción llevan años avisando a Opel del peligro de si dinámica y su pobre apuesta por la movilidad eléctrica. Algo que tendría unas repercusiones que ahora no hacen más que agravarse con una oferta en motores que los analistas indican tiene entre cinco y siete años de retraso en su desarrollo.
Eso ha llevado a Opel a incrementar recientemente el precio del Ampera-a 5.700 euros, que lleva su coste hasta los 45.000 euros. Pero incluso a pesar de esta subida, seguirá siendo deficitario y es por eso que Opel ha decidido suspender los nuevos pedidos de forma indefinida.
Ahora la única posibilidad para PSA es acelerar su propio programa de coches eléctricos, y realizar un traslado de esta tecnología a una Opel que ya prepara una versión eléctrica del popular Corsa, y también una híbrida enchufable del todocamino Grandland.
Un proyecto donde como vemos, el Ampera-e no tiene sitio, lo que casi con total seguridad llevará al final de sus ventas antes de lo esperado. Algo que sin duda será una pena ya que se trata de un modelo realmente competitivo, pero cuyo planteamiento, fabricación en Estados Unidos y venta en Europa, parece que no ha sido el más correcto.
Relacionadas
- El Ampera-e aumenta enormemente su precio, y Opel acusa a GM de ser la responsable
- Opel ordena parar las nuevas reservas del Ampera-e
Vía | Reuters