Primeras pruebas a fondo del Audi e-tron. ¿Está gustando a la prensa especializada el SUV eléctrico alemán?

Apenas un par de meses después de su presentación oficial, los medios especializados han podido comenzar a probar el Audi e-tron, el primer coche eléctrico de gran tirada de la división premium de Volkswagen. Este SUV del segmento E apuesta por una estética conservadora y una enorme carga tecnológica para luchar contra modelos como el Tesla Model X o el Mercedes-Benz EQC. ¿Está a la altura de lo que todos esperan de él?

Las primeras pruebas internacionales están teniendo lugar en Abu Dhabi, en los Emiratos Árabes Unidos. Allí, la prensa ha tenido a su disposición un surtido de unidades con las especificaciones europeas, ligeramente diferentes a las americanas con las que fue presentado en su momento en San Francisco. Poco se puede decir de la estética del modelo en sí misma, pues para la mayoría de probadores su gran virtud reside en que «es un Audi más». Correcto y atractivo, pero sin diferenciar.

En el interior pasa algo similar. Estéticamente, el salpicadero es idéntico al de los últimos modelos de la marca: los A6, A7 y A8. Por lo tanto, encontramos tres pantallas (instrumentación, navegador + sistema multimedia, y climatización), así como una estética llena de aristas. La principal diferencia reside en el uso de dos pantallas que proyectan las imágenes captadas por las cámaras que sustituyen a los retrovisores. La calidad, como es costumbre en Audi, es muy alta, y el espacio destacado, incluso para la cabeza.

En marcha, los periodistas coinciden en que el coche está muy bien insonorizado y que tiene una conducción muy suave. Los sistemas de conducción semi-autónoma (control de dirección y control de crucero adaptativo) por su parte funcionan de forma correcta, y la retención de la frenada regenerativa en condiciones normales apenas se nota (utilizando las levas tras el volante aumenta de forma notable, permitiendo frenar el coche por completo).

Respecto a la eficiencia, hay luces y sombras. En autopista, a velocidades comprendidas entre los 120 km/h y los 140 km/h, el coche tiene un consumo de 32 kWh/100 km, lo que equivale a una autonomía de unos 300 km en condiciones reales. Sin embargo, la capacidad de regeneración del coche es enorme: subiendo una montaña, consumió 9 kWh; bajándola, regeneró 6,4 kWh.

La carga rápida a 150 kW por su parte llamó la atención a los periodistas, pues permitía recuperar casi 260 km en apenas media hora. Además, el coche incorpora la capacidad de cargar a 11 kW en corriente alterna, lo que permite recuperar toda la carga en 9 horas.

Fuente | Electrek