Si por algo se caracterizaba el programa británico Top Gear hace unos años, era por la tendencia de sus presentadores a crear polémica. A pesar de que actualmente el programa ha sustituido a su antiguo trío calavera (Jeremy Clarkson, James May y Richard Hammond) por un elenco más «correcto», haciendo que el programa vuelva a centrarse más en los coches que en el humor, los tres presentadores originales siguen dando que hablar en el programa The Grand Tour de Amazon, que recupera el anterior formato de Top Gear.
Como bien sabrán los amantes de los coches eléctricos, la relación del antiguo Top Gear con los vehículos a baterías no era precisamente buena, pues en dos ocasiones el polémico Jeremy Clarkson simuló quedarse sin carga (tanto con un Nissan LEAF como con un Tesla Roadster) para «hacer la gracia», lo que le valió incluso una demanda por parte de Tesla.
Sin embargo, bajo su nueva etapa en The Grand Tour, lo cierto es que el presentador ha moderado su postura frente a los coches eléctricos, y en particular con Tesla. Aunque todavía considera que el futuro son los coches con pila de combustible de hidrógeno (a pesar de que la mayoría de la industria está apostando por los coches eléctricos a baterías), lo cierto es que tras probar un Tesla Model X, su opinión sobre la marca americana mejoró sensiblemente.
Este también es el caso de su compañero James May, que recientemente ha probado un Tesla Model S P100D (ahora rebautizado como Model S Performance), el coche más rápido de la gama Tesla… por lo menos hasta la llegada del Roadster el año que viene. Por lo que se desprende de su prueba, el presentador quedó encantado con el coche.
A pesar de que May hace referencia a algunos de los problemas de los que adolece el habitáculo de la berlina ejecutiva de Tesla (problemas de ajustes y acabado, la simplicidad de su salpicadero, el «cuero vegano» que para May no es más que plástico….), lo cierto es que el británico termina revelándose como un fanático de este tipo de interiores tan simples, felicitando a Tesla por la inclusión de pantallas táctiles masivas, pues a día de hoy es imposible de imaginar un coche que no esté «conectado».
Con todo, parece que lo que más impresionó a May fueron las prestaciones del modelo californiano, hasta el punto de llamarlo «el mejor muscle car de América», una referencia clara a su capacidad de aceleración en línea recta (los clásicos muscle cars estadounidenses, al contrario que los deportivos europeos, eran conocidos por sus grandes prestaciones en recta, mientras que en curvas no tenían un desempeño tan bueno).
Por último, May hace una curiosa reflexión sobre la experiencia de utilizar un Supercargador: «Si pasas un fin de semana con un Tesla, irás a un Supercargador y conocerás a otros conductores de Tesla, que tienen la reputación de ser grandes evangélicos. Pero en realidad no lo son, están entusiasmados con todo el asunto. Saben que esto no es en realidad la segunda venida de Cristo, es sólo Elon».
Fuente | Drivetribe
