Primeras imágenes espía del nuevo Tesla Model S 2020, que debería presentarse este septiembre

El próximo mes de septiembre, está previsto que Tesla presente sendos restylings para los Model S y Model X. Estas actualizaciones permitirán mantener competitivos a ambos modelos durante unos años más frente a rivales como el Porsche Taycan o el Audi e-tron GT, que serán lanzados al mercado respectivamente en 2019 y 2020.

Ahora, un Tesla Model S de aspecto extraño ha sido visto en Los Ángeles cerca del estudio de diseño de Tesla en Hawthorne, el cual aparentemente podría ser un prototipo del restyling. El conductor que captó las imágenes es propietario de un Model S, y detectó varios detalles extraños en la unidad avistada respecto a la suya. «Estaba conduciendo no muy lejos de la sede de Tesla en Hawthorne, cuando por el rabillo del ojo vi un Model S negro mate que venía en sentido contrario.

Lo que me llamó la atención fue su carrocería. Era muy desigual, con algunos paneles más brillantes que otros. Al principio pensé que sería un acabado de pintura descuidado. Pero entonces vi que las formas del coche en sí eran extrañas. Cuando volví a mirar, el vehículo ya me había pasado y solo podía verlo en el espejo retrovisor.

Las luces traseras eran diferentes a las de un Model S actual. Parecían más grandes. Por un instante pensé que podría ser una especie de nuevo Mazda. Pero luego vi un Model 3 justo detrás de él, también con una pintura negro mate». A pesar de que no tuvo tiempo de tomar ninguna foto, encontró algunas imágenes del Model S y del Model 3 que lo seguía en su dashcam. En ellas no se pueden distinguir demasiados detalles, si bien las ópticas frontales parecen inalteradas.

Por el momento no se sabe cómo de profundos serán los cambios estéticos del restyling, si bien se esperan pequeñas evoluciones en faros, pilotos y paragolpes. Por dentro el modelo sufrirá una evolución mayor, con un salpicadero de diseño horizontal inspirado en el del Model 3. Su calidad percibida será superior a la del Model S actual y mantendrá la instrumentación tras el volante, si bien la pantalla táctil central pasará a estar en formato horizontal y sin integrar en el salpicadero. Es posible que también veamos otros cambios como la adición de bolsas portaobjetos en las puertas.

La mayor evolución la encontraremos a nivel mecánico: se mantendrán las modificaciones de la reciente actualización «Raven», incluyendo un motor delantero más eficiente (el actual Model S Long Range alcanza con dicho propulsor una autonomía de 595 km bajo el realista ciclo de homologación EPA) y una nueva suspensión neumática adaptativa que aumenta el confort de marcha y mejora el comportamiento dinámico.

A todo esto habrá que sumar unas nuevas baterías, las cuales harán uso de las soluciones vistas en el Model 3: los nuevos packs emplearán celdas 2170 de Panasonic y tendrán un sistema de refrigeración más avanzado, lo que mejorará rendimiento. Estas baterías serán más ligeras y capaces que las actuales, y deberían permitir al Model S Long Range llegar a los 640 km de autonomía EPA.

La carga también mejorará, pues ahora se podrá llegar a los 250 kW de potencia (formato CCS Combo 2 en Europa), lo que permitirá recuperar autonomía mucho más rápido en los Supercargadores V3. Tampoco podemos olvidarnos de la Capacidad de Conducción Autónoma Total o Autopilot 3.0, la cual posiblemente sea presentada a la vez que los nuevos Model S y Model X (su lanzamiento está previsto para finales de este mismo año). Gracias a este asistente, el nuevo Model S debería ser capaz de conducir de forma autónoma por cualquier tipo de vía.

Fuente | Electrek