Volvo XC40 Recharge: un interesante SUV eléctrico con más de 400 kilómetros de autonomía y una seguridad optimizada
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Publicado: 17/10/2019 01:34
Volvo acaba de presentar su primer coche eléctrico de producción (sin contar el Polestar 2, vendido bajo una marca separada): el XC40 Recharge. Este modelo deriva del conocido XC40 térmico, un exitoso SUV del segmento C basado en la plataforma modular CMA. El vehículo ya está disponible actualmente con mecánicas híbridas enchufables Twin Engine, y más adelante recibirá variantes mild-hybrid.
En el plano estético, el XC40 Recharge se diferencia de su hermano de combustión por el uso de una elegante parrilla cegada y por la ausencia de colas de escape. Por lo demás, y sin contar con los logotipos específicos, el vehículo apenas se distingue de su homólogo térmico. La toma de carga se sitúa en la zona posterior izquierda, en la misma ubicación que la boca del depósito de gasolina en otras versiones.
Por dentro el mayor cambio radica en el uso de un sistema de info-entretenimiento basado en el sistema operativo Android de Google. Esta solución, ya vista en el Polestar 2, permitirá al modelo contar con funciones como Google Maps, Google Assistant y otras apps disponibles en la Google Play Store, complementadas por servicios propios como Volvo On Call. El XC40 Recharge también disfrutará de una instrumentación digital específica desde la que se podrá ver el navegador de Google Maps.
El vehículo medirá 4,42 metros de largo, y dispondrá de una altura libre de 17,5 cm. El maletero (con doble fondo) cubica 413 litros, mientras que bajo el capó delantero se sitúa un segundo maletero o frunk de 31 litros en el que irán entre otras cosas los cables de carga. El modelo pesará entre 2.150 kg y 2.250 kg dependiendo de las opciones que equipe, y podrá remolcar hasta 1.500 kg.
El XC40 Recharge utiliza exactamente la misma planta motriz que el Polestar 2: cuenta con dos motores eléctricos (uno por eje, lo que le da tracción total) que le dan una potencia total combinada de 408 cv (300 kW) y 660 Nm de par. Gracias a ello, el modelo puede hacer un 0 a 100 km/h en apenas 4,9 segundos. La velocidad punta se queda en 180 km/h.
Su batería de 78 kWh (también compartida con el Polestar 2) le proporciona una autonomía que superará los 400 km WLTP. El modelo podrá cargarse al 80% en apenas 40 minutos gracias a un sistema de carga rápida en corriente continua a 150 kW (formato CCS Combo 2); mientras que el cargador interno le permitirá cargar a 11 kW en corriente alterna.
La seguridad de este vehículo mejorará respecto a las variantes térmicas gracias al uso de una estructura frontal reforzada. La batería situada en los bajos por su parte disminuirá el centro de gravedad, y por lo tanto el riesgo de vuelco. Además, estará ubicada dentro de una jaula de seguridad que utilizará un marco de aluminio extruido, el cual creará una zona de deformación programada alrededor del pack. La estructura trasera también estará reforzada.
Volvo tiene planeado introducir un nuevo modelo eléctrico cada año en su gama, con el objetivo de que para 2025 la mitad de sus ventas sean de coches de este tipo. Tanto los modelos 100% eléctricos como los híbridos enchufables se englobarán bajo la gama Recharge, si bien los híbridos enchufables continuarán con las actuales denominaciones «T» (como T8) para bautizar a las distintas opciones mecánicas, dejando a los eléctricos la nueva nomenclatura «P» (el XC40 Recharge de 408 cv se denomina P8).
Fuente | Volvo
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