Tesla multada con 12 millones en Alemania por no recoger las baterías de los coches siniestrados
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Publicado: 02/11/2020 10:11
En algunos países, como Alemania o Austria, la ley exige a los fabricantes a recoger y reciclar las baterías de sus dispositivos cuando estos dejan de funcionar. Un apartado que se vuelve extremadamente complicado cuando se trata de la compleja batería de un coche eléctrico. Pero la administración no ha hecho excepciones, y por eso ha decidido multar a Tesla por rechazar la recogida de los modelos averiados o procedentes de un accidente.
Hasta ahora los propietarios de estos vehículos debían acudir a los pocos centros especializados capaces de atender este tipo d trabajos. Algo que ha provocado la queja de los primeros clientes que se han visto obligados a realizar esta operación.
Ahora la Agencia Federal Alemana de Medio Ambiente (UBA) ha dictaminado que Tesla estaba violando esta normativa y le ha impuesto una multa de 12 millones de euros.
Esta sanción se ha conocido por la publicación de la misma en los documentos que ha enviado la marca al regulador de bolsa de Estados Unidos, donde ha indicado en un informe que las acusaciones son principalmente sobre obligaciones administrativas. También ha indicado que en estos momentos ya están recogiendo las baterías, con lo que han presentado un recurso que esperan prospere y la decisión final no suponga un duro golpe a la economía de la filial alemana.
Ahora queda ver la evolución de este recurso que determinará la cuantía de la multa, en un movimiento que sienta un precedente que avisa a los fabricantes que hay que buscar una solución a la situación antes de que este se convierta realmente en un problema.
Y es que el reciclado de baterías se ha convertido en un objetivo de futuro, pero no una prioridad para los fabricantes a corto plazo. Algo que sin las medidas adecuadas supondrá que en pocos años millones de baterías lleguen al mercado para ser reutilizadas o recicladas, y no habrá capacidad para su tratamiento.
Algo que será tanto una cuestión de peligro para el medio ambiente, como también la pérdida de una oportunidad económica en relación con la segunda vida de estas baterías.
Fuente | Spiegel