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Aumentan las solicitudes para centrales de bombeo en España en 2021, más de 20 proyectos fueron presentados

Hoy día el sistema eléctrico español tiene una potencia instalada de 3.331 MW con centrales de bombeo. Se trata básicamente de centrales hidroeléctricas con posibilidad de meter «marcha atrás», embalsar el agua de nuevo, y turbinarla posteriormente para generar electricidad. En otras palabras, son almacenes de energía, aunque el rendimiento no sea del 100% por leyes físicas.

De acuerdo al Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) del Gobierno, que abarca las actuaciones durante la década presente, se duplicaría y un poco más la capacidad actual hasta llegar a 6.831 MW. Pues bien, solo con los proyectos presentados este año al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico para su evaluación ambiental, el objetivo sería logrado con creces.

Más de 20 proyectos se han presentado, combinando entre todos una capacidad de 8.435 MW, bastante más de lo previsto para 2030. Quedarían repartidos -de aprobarse todos- entre Andalucía (7), Asturias (6), Castilla y León (3), Galicia (2), Castilla-La Mancha (1), Navarra (1) y Aragón (1). Los promotores son principalmente Magtel (13), Atalaya Generación (3), Villar Mir Energía, EDP y Capital Energy.

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Las centrales de bombeo permiten almacenar mucha energía, y al igual que los coches eléctricos, pueden aplanar la curva de demanda

De todos los proyectos presentados, el que destaca por la potencia prometida, con 2.160 megavatios, estará en El Batán (Navarra) y detrás de él está Atalaya Generación. Solo con este proyecto conseguirían casi la misma capacidad de generación que acumulan con eólica y solar, actualmente más de 2.500 megavatios. El mismo grupo tiene otro proyecto en La Serrana (Cuenca) de 1.456 MW, solo entre este y el otro cumplirían los objetivos del Gobierno para la década entera.

Probablemente algún proyecto no reciba la aprobación del Ministerio y se quede en una carpeta, pero si en solo un año se presentan solicitudes suficientes para cumplir los objetivos de 2030, es que estamos ante un futuro prometedor al respecto.

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