Algunos fabricantes están empezando a ver un filón en la electromovilidad que les permite ir más allá de sus áreas de negocio tradicionales. De fabricantes de vehículos pasan a vendedores de movilidad, y no solo pensando en ciclistas y peatones, también en grandes empresas que también necesitan electrificar toda clase de vehículos. En ese menester se está metiendo General Motors.
El gigante americano ya nos ha enseñado lo que es posible tanto con vehículos eléctricos de nueva generación -plataforma Ultium- como con componentes aislados que sirven para electrificar viejas glorias como Chevrolet E-10 y Blazer-E K5, Camaro eCOPO o un El Camino SS transformado independientemente. En 2022 estas soluciones llegarán al mercado.
Pero mirando más allá, General Motors está pensando en múltiples aplicaciones. Por ejemplo, su división GM Powered Solutions permitirá electrificar todo tipo de vehículos. También mira al sector aéreo con un primer objetivo en forma de vehículos de asistencia en tierra a aeronaves, o en el sector marítimo para electrificar embarcaciones. Cualquier cosa que se mueva con un motor es susceptible de recibir motores eléctricos, baterías, electrónica de potencia y demás componentes.
Su apuesta por la electrificación incluye a otros fabricantes automovilísticos que quieran usar su tecnología, véase Honda, y también pilas de combustible de hidrógeno. Por supuesto, hablar de hardware también implica hablar de software, e incluso soluciones «todo en uno» o «llave en mano». Esta forma de hacer las cosas es bastante inteligente.
Se trata de un aprovechamiento de las economías de escala. A General Motors le sale más económico fabricar muchas más unidades de las que necesita para su propio negocio, o hacer pedidos más grandes a sus proveedores para aflojar el precio por unidad. Los motores eléctricos son mucho más polivalentes que los térmicos, que están más pensados en aplicaciones concretas.
Idea similar ha tenido Toyota con sus pilas de combustible de hidrógeno, que se ofrecen con diseños modulares para electrificar camiones, barcos, autobuses, trenes, toros mecánicos… Cuantos más clientes profesionales consigan los fabricantes tradicionales, más económicos se harán sus vehículos eléctricos propios, lo cual es una ventaja bastante obvia para sus clientes particulares…