El segundo coche eléctrico más vendido del mundo es un utilitario fabricado por la joint-venture de SAIC y General Motors en China, el Wuling HongGuang Mini EV. La versión descapotable, Cabrio, se pone a la venta pasado mañana en su país natal. Se hace así realidad el concepto anticipado el año pasado, en abril, pasando a ser un modelo más de la gama.
Los precios estarán en el abanico de 40.000 a 60.000 yuanes, 5.775 a 8.660 euros al cambio, y teniendo en cuenta que no es exactamente como un turismo del segmento A europeo. Como la capacidad de fabricarlo es elevada, no hay sistema de reservas, el primero que llega al concesionario con la «viruta» se lo lleva. La versión descapotable tiene una orientación de mercado menos espartana.
El Wuling HongGuang Mini EV Cabrio se basa en el modelo Macaron, que va más equipado, pero con diferentes dimensiones. Mide 3.059 mm de largo, 1.521 mm de ancho, 1.614 mm de alto y distan sus ejes 2.010 mm. A diferencia de los HongGuang Mini EV de techo cerrado, solamente tiene dos plazas, el peaje a pagar por un techo de lona textil con despliegue y plegado eléctrico para gozar al aire libre (cuando esté limpio, que esa es otra en China).
Como se puede apreciar, hay más mimo en los interiores, al menos en apariencia. Pretenden venderlo como un modelo más cuqui, de hecho, usarán a la actriz china Zhou Ye (周也) como gancho y será la primera propietaria de este descapotable eléctrico de bolsillo. Aquí no será una actriz muy conocida, pero en China sus fans se pueden contabilizar fácilmente por millones. Por otro lado, la revista Harper’s Bazaar colaborará en su lanzamiento.
Volviendo a las cosas en las que nos ocupamos en FCE, habrá dos versiones del descapotable, una con 200 km de autonomía y otra con 300 km, siempre considerando el ciclo chino de homologación CLTC. En cuanto a colores, se podrán elegir tres de carrocería -azul, verde y negro- con dos opciones para la lona, rojo y negro. Las puertas no tienen marco, a diferencia de cosas europeas como el Citroën Ami -cuadriciclo ligero- o el Fiat 500e -este es un turismo normal-.
La versión descapotable se suma a las Macaron y Gameboy, que dan un poco más que el modelo básico y permiten ganar algo más por unidad. El secreto de este modelo es que se fabrica en números tan elevados que los precios están ajustados al límite, siendo la ganancia neta por unidad muy pequeña. La versión descapotable también puede ser económica por las economías de escala generadas.