La inflación está pegando duro al sector de la automoción. Un sector donde la demanda supera a la oferta, lo que ha provocado un incremento notable en los precios. Algo de lo que no son ajenos los coches eléctricos que han visto como sus costes se disparaban. Hasta ahora, el Dacia Spring era la opción más económica. Pero, ¿seguirá siendo el modelo rumano la referencia en el segmento más económico?
Cuando a finales de 2021 llegó el Dacia Spring a España, su precio de salida era de unos módicos 16.550 euros en su versión básica, Confort. Hoy, si un cliente quiere hacerse con una unidad tendrá que empezar en los 20.205 euros de la versión Essential. Un 22% más que hace 12 meses.
A cambio, nos llevamos un eléctrico para el día a día. Cuenta con cuatro plazas y un motor eléctrico que rinde 33 kW (45 CV) y 125 Nm de par. La batería llega a los 27,4 kWh, que le proporcionan una autonomía de 230 km WLTP. De serie carga a 7,4 kW de potencia en corriente alterna (0-100% en 4 horas y 50 minutos), aunque opcionalmente dispondrá de carga rápida en corriente continua a 30 kW (0-80% en 1 hora).
Una carga rápida que es casi fundamental si no queremos limitarnos menormente en momentos puntuales, pero que supone tener que saltar a la versión Expression, que arranca en 21.850 euros, y añadir la opción de carga rápida que supone otros 650 euros. En total, sin añadir ningún otro accesorio la factura se eleva hasta los 22.500 euros.
Los rivales más económicos del Dacia Spring
A la vista de esto, podemos pensar en que tal vez la competencia haya apretado algo y los precios en los segmentos de acceso sean más bajos que en Dacia.
Uno de los más cercanos es el Renault Twingo ZE. La versión eléctrica del urbano galo nos ofrece un cuerpo algo más pequeño, 3.61 metros de largo por los 3.73 metros del Dacia, un motor más potente, 60 kW (82 CV) y 160 Nm de par, y una batería algo más pequeña, con sus 21,4 kWh de capacidad, siendo su autonomía de 190 km WLTP.
A su favor cuenta también que el sistema de carga de serie llega a los 22 kW en corriente alterna, con la que tarda 50 minutos en pasar del 15 al 80%, así como 1 hora y 30 minutos en pasar del 0 al 100%. No cuenta ni como opción de carga en continua, pero las cifras son muy similares a los tiempos del Spring con ella.
Un modelo también más personalizable, con mayores posibilidades de equipamiento, pero que arranca en España en los 24.540 euros, una cifra que nos indica que la inflación también ha tenido impacto en su coste que se ha incrementado un 23.4% desde el año pasado. Un precio que supone 2.650 euros más que el Spring básico sin carga rápida, o 2.040 euros más que la versión con ella.
Otra alternativas dentro del apartado de coches eléctricos económicos es el FIAT 500. El modelo italiano que destaca por factores como su diseño inconfundible, mayor nivel de calidad interior que el Dacia, y que se ha convertido en uno de los eléctricos más populares en Europa.
El FIAT 500 en su versión de acceso dispone de un propulsor de 79 kW (95 CV) con una batería de 23,8 kWh le da una autonomía de 180 km WLTP. Puede cargar a 11 kW en corriente alterna y a 50 kW en corriente continua y su precio es de 25.540 euros.
Y cómo está el mercado de segunda mano
Pues no hay muy buenas noticias si queremos encontrar una opción más económica de ocasión. Por ejemplo, lo más parecido a los modelos anteriores pueden ser los trillizos de la familia Volkswagen e-Up, SEA Mii y Skoda Citigo IV.
Propuestas polivalente con cuatro plazas y cinco puertas con motor de 61 kW (83 CV) y 212 Nm de par, que se alimenta de un pack de baterías de 32,3 kWh útiles que le da una autonomía de 259 km WLTP. En cuanto a la carga, alcanza un máximo de 7,2 kW en corriente alterna y de 40 kW en corriente continua. Unos modelos con precios desde los 20.690 euros del e-Up con más de 70.000 km, hasta los 22.990 euros del SEAT Mii con menos de 5.000 km.
Luego también tenemos al Renault ZOE, pero en este caso debemos tener en cuenta que además de ser un coche más grande, 4.08 metros de largo, muchas unidades son mostradas con la batería en alquiler. Con ella en propiedad, podemos encontrar unidades del 2018 con algo más de 50.000 km desde los 16.990 euros. Un modelo con un motor de 92 CV, una batería de 41 kWh útiles, 300 km WLTP de autonomía, y un sistema de carga en alterna de serie que llega a los 22 kW.
