Tesla está teniendo problemas para escalar el proceso de fabricación de sus nuevas celdas 4680. Este formato de batería, que debería ayudar a la firma estadounidense a reducir costes y mejorar las prestaciones de sus vehículos eléctricos, está dando más de un dolor de cabeza a los técnicos debido a algunas de las particularidades de su diseño, motivo por el que la compañía se ha visto obligada a recurrir a sus socios asiáticos LG y Panasonic para asegurarse el suministro.
Aparentemente, el problema radica en el recubrimiento en seco de los electrodos, una solución desarrollada para abaratar las celdas 4680 y reducir los tiempos de producción. Usualmente, el ánodo y el cátodo de las baterías de litio están revestidos por un recubrimiento húmedo que debe secarse antes de continuar con el proceso de fabricación, algo que consume tiempo, espacio y energía.
Si bien Tesla ya utiliza celdas 4680 en algunas versiones del Model Y ensamblado en Giga Texas, lo cierto es que dichas baterías emplean el mismo recubrimiento húmedo que podemos encontrar en las ya conocidas celdas 2170.
El recubrimiento en seco es uno de los elementos clave para lograr que la producción de la pick-up Cybertruck sea un éxito. Debido a las dificultades antes descritas, la empresa se verá obligada a recurrir a LG y Panasonic para asegurarse el suministro de baterías.
Tesla ya utiliza celdas 4680 en algunas versiones del Model Y fabricado en Giga Texas
Aunque se ha llegado a estudiar el uso de celdas 2170 en las primeras Cybertruck, finalmente se ha optado por utilizar un mayor porcentaje de baterías 4680 de origen asiático. Así, Tesla habría acordado un importante incremento en la producción con LG y Panasonic respecto a las proyecciones iniciales. Mientras que la primera planea fabricarlas en Ochang (Corea del Sur), la segunda ya las ensambla en una línea piloto en Wakayama (Japón).
Para avanzar en la tecnología del recubrimiento en seco, Tesla ha firmado acuerdos con Ningbo Ebay New Energy y Suzhou Dongshan Precision Manufacturing; además, también ha establecido una alianza con L&F Co (Corea del Sur) para el suministro de cátodos con un alto contenido en níquel (más del 90%), una solución que incrementará la densidad energética de las celdas 4680.
Este movimiento respondería al hecho de que las celdas 4680 de primera generación construidas en la planta piloto de Tesla en Fremont (California) no han alcanzado sus objetivos de densidad energética. De acuerdo con el fabricante capitaneado por Elon Musk, el uso de este formato no solo permitirá incrementar la autonomía de sus coches eléctricos en un 16%, sino también reducir los costes en un 14%.
Fuente | Reuters
