El próximo miércoles 15 de marzo, Volkswagen celebrará un importante evento en el que presentará su nuevo lenguaje de diseño, así como un adelanto conceptual de su futuro coche eléctrico de acceso. Dicho modelo, que es descrito por la propia marca como un vehículo «para la gente», se fabricará en la planta española de Martorell (Barcelona).
Esta world premiere tendrá lugar tan solo un día después de la publicación de los resultados financieros del grupo en 2022. Tras la destitución de su anterior CEO, Herbert Diess, el Grupo Volkswagen se encuentra inmerso en un proceso de reestructuración. Su sustituto, Oliver Blume, ha cambiado significativamente el plan de producto para los próximos años.
El evento será organizado por el director ejecutivo de la marca, Thomas Schäfer, junto con Andreas Mindt, su nuevo director de diseño. Los rumores apuntan a que ambos mostrarán un prototipo del futuro ID.2, cuyo diseño se ha rehecho por completo en los últimos meses con el objetivo de darle un nuevo posicionamiento en el mercado.
Aparentemente, el proyecto habría sido rebautizado como ID. Golf en un intento de capitalizar la enorme popularidad de esta mítica denominación. Frente el ID.2 original, el ID. Golf será un poco más largo, si bien seguirá teniendo un precio de partida inferior a los 25.000 euros. Su estética podría inspirarse en la del Golf Mk4 (1997-2004), uno de los miembros más recordados de esta ilustre saga.
¿Volkswagen ID.2 o ID. Golf?
El hipotético Volkswagen ID. Golf compartirá sus entrañas con el CUPRA Raval; por lo tanto, se asentará sobre la versión de tracción delantera de la plataforma MEB+. Sin embargo, no se descarta que más adelante se añadan variantes de altas prestaciones R con tracción total, una opción que no estaba contemplada inicialmente para el ID.2.
También existirá un modelo GTI de 226 CV (166 kW) y tracción delantera. En un principio, el coche estará disponible con dos tipos de baterías: una con celdas LFP (litio-ferrofosfato) de aproximadamente 40 kWh que debería permitirle superar los 300 km WLTP de autonomía, y otra con celdas NCM (níquel, cobalto, manganeso) de unos 60 kWh con la que se acercará a los 450 km WLTP.
Las baterías procederán de una nueva gigafábrica que se construirá en Sagunto (Valencia). En cuanto a la carga, debería ser capaz de recuperar unos 160 km de alcance en aproximadamente 10 minutos. Mientras que el CUPRA Raval comenzará a ensamblarse en julio de 2025, su mellizo de Volkswagen se hará esperar dos o tres meses más.
