Volvo presenta una excavadora eléctrica de 23 toneladas

Volvo Construction Equipment trabaja en el diseño de una gama de vehículos de trabajo pesados alimentados por electricidad en una alternativa que busca reducir emisiones y los costes fijos. Una inversión que está permitiendo diseñar propuestas como la excavadora EC230 que ha recibido una versión 100% eléctrica y que comenzará en breve su producción

La la compañía sueca anunció que estaba invirtiendo millones de euros en la expansión de su programa eléctrico, incluyendo la fábrica de Changwon, Corea del Sur, donde se da forma a las baterías de su maquinaria industrial.

La excavadora eléctrica Volvo EC230 es un modelo de 23 toneladas de uso general diseñada para funcionar en las mismas aplicaciones que una excavadora diésel de tamaño similar, incluida la extracción, el movimiento de tierras y la nivelación para la preparación del terreno en el segmento de la construcción, así como en otros como el tratamiento de residuos o chatarra.

Tiene las mismas fuerzas de excavación y capacidades de elevación que su equivalente diésel, y admite los mismos accesorios y servicios. La principal diferencia es que funciona con electricidad, dando como resultado un modelo que además de cero emisiones directas, hace menos ruido, cuenta con un menor mantenimiento y en definitiva un menor coste total de propiedad.

El inicio de las ventas arrancará a principios de 2024, cuando la EC230 eléctrica estará disponible comercialmente uniéndose a la línea de Volvo CE que ya cuenta con hasta seis propuestas eléctricas de construcción de servicio pesado, la mayor oferta de este tipo en la industria.

Según Volvo, la excavadora eléctrica permite a los clientes lograr una reducción de los costes operativos de al menos entre el 60 y el 70% respecto a un modelo diésel de similares características.

Está equipada con cuatro packs de baterías de litio de 66 kWh cada uno, que le otorgan una autonomía de unas cinco horas. Dispone de carga rápida, por lo que según el fabricante, con una parada a la hora de comer, este modelo podrá lograr completar las 8 horas de trabajo.

Desde Volvo se ha indicado que se trata de un producto que lleva tiempo siendo probado de forma discreta por diferentes clientes en varias localizaciones diferentes, y en cada caso ha ofrecido el mismo rendimiento que su equivalente diésel, lo que ha permitido dar luz verde al inicio de su fase comercial.

Fuente | Volvo CE