La electrificación llega también a los food trucks para reducir las emisiones contaminantes en la ciudad
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Publicado: 24/10/2023 16:12
Un foco más de contaminación en las ciudades (aunque en España no sean tan habituales en el día a día de nuestras ciudades) son los llamados food trucks, o camiones restaurante, los cuales están cada vez más de moda.
Para que estos puedan funcionar y dar servicio a todo tipo de herramientas de trabajo necesitan generadores, los cuales suelen ser diésel o gas. Neveras, planchas, hornos, microondas… necesitan de electricidad para funcionar, y estos generadores se encargan de proporcionar la energía suficiente.
Eso sí, a cambio, emiten mucho ruido y, sobre todo, humos nocivos al aire: monóxido de carbono, CO2, partículas… afectando al medio ambiente y pudiendo ser también contraproducentes para nuestra salud.
Para que te hagas una idea, un único camión de helados con un generador diésel emite el equivalente a quemar 37 kg de carbón al día. Y eso, contando que en Estados Unidos hay más de 35.000 food trucks, es mucha contaminación que puede ser innecesaria.
Una solución limpia y silenciosa
Estos datos son de James Waggoner, director ejecutivo de la start-up norteamericana Joule Case. Con sede en Seattle, esta compañía ha ideado un sistema por el cual los food trucks pueden funcionar con generadores portátiles eléctricos: estos constan de un sistema de baterías modulares móviles y unos paquetes de inversores, ofreciendo así una alternativa eléctrica más beneficiosa en todos los sentidos.
Joule Case comenzó a operar antes de la pandemia proporcionando generadores eléctricos en festivales de música. Ahora están de lleno con los foodtrucks y ya hacen funcionar con su tecnología a más de un centenar de camiones de comida y helados en los Estados Unidos. Ofrecen diferentes paquetes de baterías e inversores, desde 3 kW/5 kWh hasta 26 kW/90 kWh, con la opción incluso de emparejarlos con placas solares.
Una innovadora idea que tiene muchos beneficios: aparte del ahorro de emisiones contaminantes, supondría una gran ventaja para estos pequeños comercios, ya que las empresas contratantes buscarán proveedores más eficientes. Por otro lado, las regulaciones actuales y futuras apretarán para exigir soluciones más limpias que los actuales generadores de gas. Además, son tecnologías más silenciosas y que se averían menos.
Un paquete básico de la start-up Joule Case viene a costar unos 20.000 euros; sin embargo, la compañía afirma que en solo un año se puede recuperar el dinero gracias al ahorro en combustible y reparaciones. Además, los sistemas de más de 5 kWh optan a las ayudas fiscales federales del 30%.
El objetivo de la empresa es poder convertir 2.000 food trucks en eléctricos en los próximos 5 años, apostando también por meter mano en el sector de los equipos de construcción próximamente.
Fuente | Electrek