Italia amenaza con retirar los fondos europeos a Stellantis si no construye su prometida gigafábrica de baterías
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Publicado: 26/08/2024 16:39
El conflicto entre Stellantis y las autoridades italianas continúa recrudeciéndose. Tras la decisión del grupo de congelar temporalmente sus planes para construir una gigafábrica de baterías en el país debido al enfriamiento de la demanda de coches eléctricos, el ministro de Industria ha amenazado con retirar los fondos públicos destinados al proyecto para utilizarlos en otras iniciativas.
ACC (Automotive Cells Company), el fabricante de baterías respaldado por Mercedes-Benz, Saft (TotalEnergies) y la propia Stellantis, anunció recientemente su intención de reevaluar la construcción de sus gigafábricas en Alemania e Italia. El consorcio ya opera una planta de este tipo en Douvrin (Francia).
El proyecto de construir tres gigafactorías en Alemania, Francia e Italia, que conllevaría una inversión total de 7.000 millones de euros, no se completará a corto plazo. En el caso concreto de Kaiserslautern (Alemania), ACC está planteándose la posibilidad de producir celdas de tipo LFP (litio-ferrofosfato), ya que se prevé que en los próximos años las ventas de coches eléctricos aumenten principalmente en los segmentos de volumen. Eso sí, su apertura, prevista inicialmente para 2025, se pospondrá un par de años.
En el caso de la gigafábrica de Termoli (Italia), las inversiones previstas ascendían a los 2.000 millones de euros… incluyendo un total de 370 millones de fondos públicos procedentes de la Unión Europea. «Stellantis debe darnos una respuesta y debe hacerlo pronto», declaraba a finales de la semana pasada el ministro Adolfo Urso. «Si Stellantis no nos da una respuesta positiva en cuestión de horas, trasladaremos los fondos a otra parte. No podemos permitirnos perder estos fondos porque Stellantis no cumpla con sus compromisos».
La relación entre el Gobierno italiano y Stellantis no pasa por su mejor momento
Stellantis respondió a este ultimátum con una nota de prensa en la que afirmaba estar trabajando en un plan para introducir una nueva tecnología de celdas con el objetivo de adaptarse a la evolución del mercado, lo que nos lleva a pensar que también adoptará la química LFP. Para compensar el retraso en la transformación de las instalaciones de Termoli, el grupo aumentará la producción de componentes para motores híbridos. El nuevo cronograma industrial se dará a conocer a finales de este año o principios del que viene.
En los últimos meses, la relación entre el Gobierno italiano y Stellantis ha ido agriándose a gran velocidad. Valiéndose de la ley «Made in Italy», que busca evitar que se hagan pasar productos extranjeros por italianos, el ejecutivo de Meloni recientemente impidió a la compañía el uso de la bandera nacional en los FIAT Topolino y 600 por estar fabricados en Marruecos y Polonia, mismo motivo por el que Alfa Romeo se ha visto obligada a renombrar el SUV Milano como Junior. Carlos Tavares, CEO de la empresa, ha amenazado por su parte con el posible cierre de plantas si Italia decide acoger fábricas chinas en su territorio.
Fuente | Yahoo Finance