Honda presenta el CR-V FCEV, el eslabón perdido entre el coche de hidrógeno y el eléctrico a baterías

Actualmente, el reducidísimo mercado de turismos con pila de combustible de hidrógeno se limita a grandes rasgos a dos únicos modelos a nivel internacional: el Hyundai Nexo y el Toyota Mirai. Sin embargo, hace unos años había un tercer contendiente: el Honda Clarity Fuel Cell, que fue discontinuado en 2021.

Ahora, la firma japonesa vuelve a la carga con el anuncio de una versión de hidrógeno de su popularísimo CR-V. El nuevo modelo, cuyo debut tendrá lugar a finales de este mismo año, ha sido mostrado por primera vez en un vídeo oficial en el que todavía se muestra completamente cubierto de camuflaje.

En realidad, el CR-V FCEV será un híbrido enchufable, pues contará con una batería que podrá cargarse en una toma convencional en caso de que no haya una estación de repostaje de hidrógeno cerca, reduciendo con ello su dependencia de una red escasa y con serios problemas de confiabilidad. Además, dispondrá de carga bidireccional.

A pesar del camuflaje, se puede apreciar que el SUV recibirá algunos cambios estéticos para diferenciarse de sus hermanos con motor de combustión interna. El frente ha sido modificado para albergar una calandra más delgada y unas tomas de aire inferiores de mayor tamaño, mientras que los pilotos lucen un efecto cristal.

Honda estima que los coches de hidrógeno se popularizarán dentro de 15 años

Su producción se llevará a cabo en el Performance Manufacturing Center de Honda en Ohio (Estados Unidos), y en un principio sólo se comercializará en Japón y Norteamérica. Por el momento no hay planes para ofrecerlo en Europa, si bien cabe la posibilidad de que forme parte de un programa piloto de la marca para testar la viabilidad de esta tecnología en el viejo continente.

El líder de electrificación en Honda, Inoue Katsushi, afirmaba recientemente que, tras la era de los coches eléctricos a baterías, llegará el turno de la pila de combustible de hidrógeno. Una visión que no comparten muchos analistas, ya que los elevados costes y su menor eficiencia dificultan su implantación en el sector del transporte ligero.

De acuerdo con el ejecutivo, los coches de hidrógeno se asentarán en el mercado hacia 2040. «Nuestra pila de combustible de próxima generación es lo suficientemente competitiva. El negocio de las pilas de combustible llegará primero a los vehículos comerciales, ya hemos comenzado en China y algunos otros países. Luego llegará a los vehículos de pasajeros, pero más tarde, ahora no».