Tras un 2024 decepcionante, el mercado de los coches eléctricos espera un 2025 de importante recuperación
El recién terminado 2024 ha sido complicado para las ventas de los coches eléctricos a nivel mundial. Sin embargo, las previsiones para el nuevo 2025 son bien diferentes y, de cumplirse, a industria retomaría el vuelo. Pero no todo son buenas noticias.
La industria del automóvil, hablando en términos generales, ha vivido un año 2024 de estancamiento. Según los analistas de S&P Global Mobility, este nuevo 2025 seguirá una tendencia similar, con la previsión de que se matriculen 89,6 millones de coches nuevos en todo el mundo, algo que supondría un aumento ligero del 1,7% interanual. «Un crecimiento cauteloso de la recuperación», aseguran de unas previsiones que, en todos los ámbitos, han sido más cautelosas debido al clima de desconfianza que hay entre los fabricantes y, sobre todo, los consumidores.
Algunos de los factores que apuntan a un «2025 sumamente desafiante para la industria automotriz» son, por ejemplo, las tasas de interés elevadas, los elevados precios de los coches nuevos (se espera no obstante la llegada de nuevos eléctricos más asequibles este año), los desafíos de la electrificación y, poniendo nombres y apellidos más concretos, los desafíos que plantea la nueva administración Trump en Estados Unidos. El crecimiento previsto para el 2025 depende de cada región: por ejemplo, según S&P, en Europa apenas sufrirá un incremento del 0,1%, mientras que Estados Unidos podría afrontar un 1,2% de subida y China un 1,4%.
Centrándonos en lo que respecta a los vehículos eléctricos, el 2025 será el año en el que las marcas chinas deberán afrontar en Europa ya desde el principio la aplicación de los aranceles adicionales de los que tanto hemos hablado el año pasado. Sin embargo, la posible instauración de un arancel universal en Estados Unidos y las amenazas de Trump al sector podrían ir en detrimento de todas las marcas en general, también las occidentales. En 2024, recordemos, también hemos vivido al ‘recogida de cable’ de prácticamente todos los fabricantes con sus planes de electrificación, mientras que algunos gobiernos como el alemán dieron carpetazo a las ayudas públicas a la compra de coches eléctricos.
A la espera de las cifras definitivas, se calcula que el mercado de los coches eléctricos alcance los 11,6 millones de unidades vendidas a nivel mundial, lo que significaría representar el 13,2% de la participación de mercado. Según S&P Global Mobility, en 2025 se espera que la cifra de ventas suba considerablemente hasta los 15,1 millones de unidades vendidas, un 30% más respecto al ya pasado 2024. Unas previsiones, como puedes ver, bastante halagüeñas, sobre todo para el mercado europeo. Así ve el reparto de las ventas mundiales de coches eléctricos:
- Europa: 20,4% de la participación estimada de los coches eléctricos en la región, con una subida del 43,4% en 2025.
- Estados Unidos: 11,2% de la participación estimada de los coches eléctricos en la región, con una subida del 36% en 2025.
- China: 29,7% de la participación estimada de los coches eléctricos en la región, con una subida del 19,7% en 2025.
- Global: 16,7% de la participación estimada de los coches eléctricos en el mundo, con una subida del 29,9% en 2025.
«De cara a 2025 persisten muchas incertidumbres respecto del ritmo de la electrificación, especialmente en lo que respecta a la infraestructura de carga, la red eléctrica, las cadenas de suministro de baterías, las tendencias de abastecimiento global, las barreras arancelarias comerciales, el ritmo de los avances tecnológicos y el nivel necesario de apoyo de los responsables políticos para facilitar la transición de los combustibles fósiles a alternativas eléctricas», advierten desde S&P Global Mobility, que aun así ven retazos positivos en el mercado automovilístico de coches eléctricos a nivel global. ¿Se cumplirá? Solo el tiempo lo dirá…
Recordemos que la industria europea se enfrenta al reto de llegar sí o sí a una cuota del 20-25% para poder evitar las multas por exceder las emisiones de CO2, y eso pasa o bien por incrementar sus cifras de ventas de coches eléctricos o reducir las de los vehículos con motor térmico. Si no, se arriesgan a multas de hasta 15.000 millones de euros.