Si te has quedado tirado en la carretera por agotar la capacidad de las baterías, te damos algunos consejos sobré qué hacer y qué no hacer en esta situación. Aunque la posibilidad de quedarse tirado existe, en los últimos años los fabricantes de coches eléctricos han hecho un esfuerzo para desarrollar mecanismos para evitar que esto ocurra. Al mismo tiempo, han surgido nuevas soluciones y servicios que nos permiten volver a estar en circulación lo más pronto posible.
A pesar de que los coches eléctricos ofrecen autonomías de entre los 300 y 500 kilómetros, todavía existe el miedo a quedarse tirado por culpa de agotar la batería. Un miedo heredado de la falta de experiencia de los primeros vehículos eléctricos que ofrecían autonomías alrededor de los 200 kilómetros y cuya degradación aumentaba aún más esta angustia por quedarse tirado.
¿Qué hacer si no nos queda batería?
Veamos cuales son los pasos a realizar si somos conscientes de que nos vamos a quedar sin batería en medio de nuestro trayecto.
Apartar el coche de la circulación
Lo primero es apartar el coche mientras podamos hacia un lugar seguro donde estacionarlo no suponga un riesgo para nosotros ni para el resto de conductores. Nos exponemos a una multa de entre 80 y 200 euros por realizar maniobras peligrosas al apartar el coche, no señalizarlo u obstaculizar el tráfico. Debemos señalizar correctamente el coche parado con los triángulos y salir con el chaleco reflectante o usar la nueva luz de emergencia V-16 en el capó del coche.
Avisar a nuestra compañía de seguros o asistencia contratada.
En el caso de los coches eléctricos, las pólizas suelen incluir en la cobertura el traslado del coche hasta el punto de carga más próximo donde podremos recargar nuestro vehículo y seguir la marcha. Algunas empiezan a ofrecer incluso la recarga in situ, donde recuperamos un poco de autonomía para poder acercarnos nosotros mismos a un punto de carga o a nuestra casa y completar la carga. Esto supone una ventaja para el conductor porque reduce el tiempo de espera.
Este mismo servicio se está ofreciendo por parte de las empresas de asistencia en carretera como RACC, que están incorporando a su flota vehículos que permiten la carga in situ y el traslado en grúa hasta el punto de carga más cercano.
Contratar los servicios de una grúa o taller
Si no tenemos la posibilidad de recurrir al seguro o a la asistencia, no nos quedará otro remedio que solicitar la ayuda de una empresa privada de grúas o talleres. Como en el caso anterior, existe la posibilidad de que nos puedan ofrecer la recarga in situ que es lo más cómodo para nosotros. Aunque no está muy extendida, en el caso de Madrid y Barcelona los talleres FirstStop ofrecen un servicio de recarga que permite recuperar en 30 minutos unos 70 km de autonomía, que son suficientes para llegar a un punto de recarga en estas ciudades. Bateriasadomicilio.es ofrece un sistema equivalente en algunas ciudades más como Vigo, Zaragoza, Valencia, Málaga y Sevilla.
En caso de necesitar la ayuda de una grúa, es imprescindible especificar en la llamada que se trata de la batería de un coche eléctrico. Debido a la ausencia de cambio en los eléctricos y estar conectadas las ruedas al motor, el motor al inversor y el inversor a la batería, mover el coche sin carga puede generar una energía que provoque daños en el vehículo. El traslado en grúa debe ser en plataforma o usando calzas, en todo caso, con las ruedas fijas. Por este mismo motivo está desaconsejado empujar un vehículo eléctrico detenido ni llamar a un amigo con una pickup que te ayude a remolcarlo. Aunque hay excepciones como el primer Nissan Leaf que permite ser remolcado sobre las ruedas traseras.
¿Cómo evitar quedarnos sin batería durante el trayecto?
La única solución es la previsión. No debemos sobreestimar la autonomía de nuestro vehículo y tenemos que mantenerla por encima de lo necesario hasta el punto de recarga más cercano.
Si vemos que estamos en una situación donde deberíamos estirar al máximo la autonomía hay una serie de medidas que podemos adoptar para ganar unos kilómetros extra.
- Activar el modo ECO de nuestro vehículo. En este caso se toman diversas medidas por parte del coche como suavizar las acelerones y aumentar la regeneración de los frenos.
- Desconectar la climatización y el infoentretenimiento. La calefacción tanto sea de resistencia como bomba de calor consume autonomía de nuestra batería. En pruebas hechas con un Smart Fortwo el ahorro de energía con la calefacción apagada llegó al 7%.
- Evitar recorridos con cuestas, altas velocidades o mucho tráfico. En estas tres situaciones vamos a acelerar el consumo de la batería, por lo que si es posible, buscaremos rutas alternativas que permitan esa circulación suave y sin acelerones compatible con el modo ECO.
Como último recurso, hay marcas que se guardan un pequeño as en la manga. Marcas como KIA, Mercedes o Tesla permiten circular el vehículo por debajo el 0% de batería. El KIA e-Niro permite circular durante un corto período de tiempo a 12km/h. El Tesla Model 3 y el Jaguar i-Pace nos dan una autonomía extra de 10 y 32 km al llegar al 0 en el indicador de batería y Mercedes lo rebaja a un sólo kilómetro para poder retirar el vehículo con seguridad. Consulta el manual de tu coche para saber si tu coche tiene algún extra de este tipo cuando se agota la batería.
