Después de comprarnos un coche eléctrico, lo siguiente que nos preocupa es hacernos con una tarjeta para poder utilizar los puntos de recarga públicos de nuestra zona, una labor que podría parecer sencilla pero que puede convertirse en un infierno por la nula coordinación entre los diferentes operadores que obligan a los usuarios a contar con varias tarjetas.
Pero el problema viene cuando queremos visitar una ciudad o una región diferente donde no tenemos abono, pero necesitamos más que nunca realizar una recarga, una aventura que se torna en misión imposible en muchas ocasiones ya sea por que estamos limitados por un horario para obtener la tarjeta, o simplemente no sabemos ni donde obtenerla. Para solucionar este problema, hay alternativas como la mostrada durante la conferencia Plug In Conference de San Diego, California, donde se ha presentado PlugShare.
Se trata de una aplicación móvil que nos permite ver los puntos de recarga disponibles en nuestra zona, reservarlos y pagar por su uso mediante una tarjeta de crédito asociada a nuestra cuenta, una forma que permite a cualquier usuario poder disfrutar de la infraestructura, al mismo tiempo que no se incrementa el coste los los puntos añadiendo un lector de tarjetas de crédito.
Además el planteamiento del PlugShare permite que varios operadores puedan ofrecer sus servicios sin que el cliente tenga que estar pendiente de su contratación, y de esa manera simplemente tendrá que navegar con su teléfono, seleccionar el punto y el sistema se encargará automáticamente de enviar el pago al propietario de ese espacio.
Se trata de copiar en la medida de lo posible el sistema que lleven décadas utilizando los vehículos con motor de combustión, los cuales no necesitan tarjetas ni abonos para recargar en cualquier gasolinera, una cuestión que será de crucial importancia para acelerar la implantación de los coches eléctricos.
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