Aprovechando la repercusión del Salón del Automóvil de Pekín, Tesla ha presentado al público chino uno de sus grandes logros. Un supercargador que además de cargas ultra rápidas está conectado a una batería, que a su vez es alimentada por un sistema de placas solares.
Este supone el primer paso de una estrategia en el gigante asiático, donde esta infraestructura jugará un papel primordial. Como hemos visto anteriormente, los Chinos quieren coches eléctricos, y el gobierno ofrece enormes incentivos, pero hay un problema de confianza en la autonomía de los mismos. Algo de lo que Tesla espera sacar provecho no sólo con la autonomía de sus ocches, si no también con una red de supercargadores.
Según la nota de prensa de Tesla, la estación presentada en Pekín, es un punto móvil que cuenta con un sistema de placas fotovoltaicas flexibles fabricadas por Hanergy. Además de la peculiaridad de adaptarse a la estructura, estas placas han demostrado alcanzar según Tesla, un elevado nivel de eficiencia, que las convierten en perfectas para este tipo de aplicaciones.
En estos momentos hasta 7 estaciones están siendo preparadas para su entrada en funcionamiento. Una primera piedra de un amplio despliegue en el que se espera se convierta en el primer mercado del coche eléctrico a medio plazo, y donde nadie quiere quedarse fuera.
Vía | Prnewswire
