Está claro que Toyota no ganará ningún concurso de popularidad entre los amigos de los coches enchufables.
Después de su apuesta por la pila de combustible de hidrógeno, y de lanzar sólo un eléctrico por obligación en California, ahora el fabricante japonés acaba de anunciar un retraso del nuevo Toyota Prius enchufable.
Según parece, este retraso se debe a la necesidad de mejorar las cifras de eficiencia de la nueva generación del híbrido. Esto supone en la práctica, que la primera unidad de la versión «normal» llegaría al mercado a finales de 2015.
El retraso en el inicio de la producción también afectará a la versión Plug-in. Su lanzamiento estaba programado para un año después de la versión convencional. Esto quiere decir que hasta finales de 2016, no comenzaría su fabricación, lo que nos lleva hasta principios del 2017 como fecha para su llegada al mercado. Una dilatación realmente importante.
Podríamos pensar que un lanzamiento tan tardío, supondría una mejora de la oferta del Prius enchufable. Pero parece que los más de dos años que falta para su llegada, no supondrá la llegada de una propuesta mucho más ambiciosa. Según Toyota, la autonomía pasará de los 25 kilómetros actuales en modo eléctrico, hasta los 32 kilómetros.
La cuestión es que para 2017, la oferta en su segmento será bastante mejor. Por ejemplo, la nueva generación del Chevrolet Volt. El eléctrico con extensor de autonomía llegará el próximo año, y lo hará con un precio más económico que la actual versión, y además con una autonomía que se acercará a los 100 kilómetros con cada carga, tres veces la del futuro Prius.
Pero Toyota espera que Prius continúe significando ventas. Un vivir de las rentas, que en algún momento tendrá que terminarse.
Vía | MS
