Hace 20 años los japoneses eran testigos de excepción del desembarco de un nuevo coche dotado de un revolucionario sistema de propulsión. Era 1995, y el Toyota Prius comenzaba de forma extremadamente tímida sus primeras entregas. Tanto, que ese año apenas 300 unidades fueron matriculadas.
Dos décadas después esas 300 unidades se han convertido en 8 millones de híbridos, que han permitido mejorar la eficiencia energética de lugares tan acostumbrados a los grandes motores como son los Estados Unidos. Pero ha sido en Japón donde la familia de híbridos de Toyota han logrado sus mejores cifras de ventas.
Según el fabricante japonés, sus híbridos han evitado unas emisiones de 55 toneladas de CO2, y han ahorrado el consumo de 22 millones de kilolitros de combustible su en lugar de un híbrido, los consumidores optasen por opciones similares con motor de combustión.
A pesar de que Toyota, y Lexus, acumulan un total de 30 modelos híbridos en sus gamas, el Prius sigue siendo de lejos el más popular con nada menos que 3.5 millones de unidades vendidas. Le sigue muy de lejos el pequeño Prius C, con 1.1 millones, y el todocamino Lexus RX 400h/RX 450h con un total de 318.000 unidades entregadas.
En cuanto a la salud de las ventas, a pesar de estar de capa caída en mercados claves como Estados Unidos, la familia de híbridos de Toyota sigue creciendo en mercados como el japonés y el europeo. En total el pasado año Toyota ha logrado matricular un total de 1.266.000 unidades, que suponen un pequeño retroceso respecto a las 1.279.000 unidades del 2013.
Ahora la gran pregunta es si con la nueva generación del Prius, y las consiguientes evoluciones del resto de la familia, Toyota logrará mantener el elevado ritmo de ventas, o la llegada de nueva competencia hace que el año 2013 haya sido el «peak oil» para la propia Toyota.
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