Uno de los principales problemas del coche eléctrico que impide su expansión a nivel masivo, es el elevado precio. Incluso en sus versiones más económicas, un eléctrico multiplica el precio de un equivalente con motor de combustión.
Esto es algo que llevado a Storm Sondors, fundador de Sondors Motors, a pensar que si ha sido capaz de poner en el mercado una bicicleta eléctrica por menos de la mitad de lo que cuesta un modelo de la competencia, por qué no hacer lo mismo con un coche eléctrico.
El resultado es un proyecto que de momento sólo es una idea sobre el papel, pero una idea de lo más interesante. Un pequeño coche eléctrico con capacidad para tras pasajeros, que contará con un cuerpo fabricado en aluminio, lo que ayudará a reducir el peso del conjunto. Un prototipo del que por fin hemos podido ver las primeras imágenes, que nos demuestran que a pesar de ser un modelo de tres ruedas, cuenta con un aspecto razonablemente atractivo.
El objetivo es poner un coche dotado de baterías modulares. De esa forma el cliente podrá adaptar su compra a sus necesidades y presupuesto, con un pack de acceso con 80 kilómetros de autonomía, un segundo pack que llegará a los 160 kilómetros, mientras que la tercera opción elevará la autonomía del Model Sondors hasta los 320 kilómetros.
Lo mejor de todo es el objetivo económico. Como hemos dicho, para Sondors lograr el coste más bajo es una prioridad. Algo que ha logrado con su bicicleta eléctrica, y que ahora quiere trasladar a un coche. Un modelo que partirá desde los 10.000 dólares. Evidentemente, el precio de la versión con la batería más pequeña. Pero que supondrá una alternativa muy accesible, a la que posiblemente se puedan restar las ayudas públicas, lo que dará como resultado un coche eléctrico realmente de bajo coste.
En estos momentos Sondors está recaudando dinero para terminar el diseño. Una campaña que pretende lograr captar 1 millón de dólares, suficientes para completar el primer prototipo funcional. Sin duda, un momento clave del proyecto que posiblemente tenga lugar a finales del próximo año. Posteriormente llegarán nuevas rondas de financiación, que permitirán poner en marcha una línea de montaje que según Sondors, espera poner a trabajar con al menos 120.000 pedidos iniciales.
Como siempre en estos casos, el éxito del proyecto depende tanto del potencial del producto, como de la capacidad de la empresa de plasmar con éxito lo diseñado sobre el papel. También hace falta financiación. Pero después del éxito arrollador logrado en su anterior iniciativa, es posible que los inversores abran el grifo y permitan convertir al Model Sondors en una alternativa real.
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Vía | Autoblog
