Renault vende su participación en China a Dongfeng, para centrarse en los coches eléctricos y los vehículos industriales

Renault acaba de confirmar hace pocas horas un sorprendente movimiento que supone el final de la empresa conjunta con la china Dongfeng. El fabricante galo ha vendido su participación lo que supondrá el final de la marca Renault en el mercado de turismo convencionales, centrándose a partir de ahora en los vehículos eléctricos y los industriales.

El impacto del coronavirus está detrás de un movimiento que busca inyectar liquidez al grupo, al mismo tiempo que también estrechar la relación con sus socios de Nissan en un momento donde la Alianza parece ser más importante que nunca para las marcas.

Así lo ha confirmado Francois Provost, presidente de Renault en China. «Estamos abriendo un nuevo capítulo en China. Nos concentraremos en vehículos eléctricos y vehículos comerciales ligeros, las dos vías principales para una movilidad más sostenible y aprovecharemos más eficientemente nuestra relación con Nissan».

Con este movimiento además Renault quiere adelantarse a la evolución de un mercado que camina hacia la electrificación, y de esa manera los franceses mantienen su empresas conjuntas GT New Energy Automotive (eGT) y Jiangxi Jiangling Group Electric Vehicle (JMEV).

Estas se encargarán ahora de ser la cara visible de Renault en el mercado chino y donde el gran protagonista será el K-ZE. El modelo de bajo coste lanzado al mercado en 2019, y que se convertirá en la gran referencia de Renault en este mercado, que además se venderá bajo otras como Venucia (una empresa conjunta puesta en marcha por Nissan y Dongfeng); y otras tres denominaciones propiedad de Dongfeng.

Un modelo que llegará en 2021 al mercado, y que está a la venta con precios después de ayudas por debajo de los 9.000 euros. Una propuesta que tendrá que ser acompañada por nuevos lanzamientos en los próximos meses para lograr crear una familia más completa que permita a Renault continuar sacando partido a un mercado que ha visto como sus cifras de ventas también se derrumbaban, pero donde los coches eléctricos surgen como un salvavidas que Renault ha visto, y que quiere aprovechar.

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