Polestar no levanta cabeza. Nueva llamada a revisión por problemas en el sistema eléctrico

Se está convirtiendo en una rutina lo de las llamadas a revisión en la joven empresa sueca Polestar. En los dos meses que lleva en el mercado ya ha protagonizado dos llamadas a revisión por culpa de diferentes problemas, además de un incidente durante la recarga de una unidad, y la denuncia de Citroën sobre su logo. Ahora de nuevo el fabricante ha vuelto a realizar una llamada a todas sus unidades para acudir a su taller más cercano.

Esta implica la sustitución del inversor defectuoso en la mayoría de los vehículos entregados a los clientes. Un elemento crucial que se encarga de transformar la energía almacenada en la batería a los motores eléctricos, y que supondrá la revisión de un total de 4.586 unidades.

La segunda parte de la revisión tendrá que ver con el sistema de climatización de la batería y el habitáculo, que tendrá que ser reemplazado en las primeras 3.150 unidades fabricadas que recibirán uno nuevo.

Estas actualizaciones podrán ser realizadas en una sola visita al taller Polestar más cercano, y será a partir del próximo 2 de noviembre cuando comiencen a comunicar de forma personal a los afectados para concretar su cita con el servicio técnico.

Por su parte los vehículos pendientes de entrega se confirma que recibirán las actualizaciones, pero al mismo tiempo indican que esto afectará a las fechas de entrega que se dilatarán ligeramente.

Durante este proceso, Polestar también ha confirmado que se aprovechará el paso de todas las unidades por el taller para activar el sistema de actualizaciones OTA, que todavía no está en funcionamiento, y que permitirá a la marca poder realizar algunas labores de mantenimiento a distancia.

Un ejemplo de lo difícil que es la producción de un coche eléctrico que no supone solo poner un motor eléctrico y unas baterías. Unos vehículos cada vez más sofisticados y conectados que en sus primeras ediciones suelen venir acompañados de limitaciones que se van solucionando con el paso del tiempo y las sucesivas actualizaciones. Algo que por desgracia tiene en los usuarios los principales perjudicados ya que deben estar pendientes de llevar el coche a un muchas veces lejano centro técnico.

Fuente | Polestar

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