Habitualmente en las conversaciones sobre el futuro de las redes eléctricas, son muchos los que se preguntan cómo vamos a tener un sistema 100% renovable. La respuesta son las muchas alternativas que existen más allá de los sistemas tradicionales, y como prueba de ello es el proyecto Solgest-1 que levantará la primera planta termosolar híbrida de España dotada de respaldo y solar fotovoltaica.
Obra del Grupo Sener, con sede en la localidad vasca de Getxo, que a través de su filial Proasego Energías Alternativas ha confirmado el proyecto que supondrá levantar en Fuentes de Andalucía (Sevilla) una gran planta híbrida que combinará energía termosolar, energía fotovoltaica, y almacenamiento por sales fundidas.
La instalación termosolar contará con una potencia instalada de 110 MW, y utilizará un sistema de colectores cilindro-parabólicos. Por su parte la granja solar fotovoltaica añadirá otros 40 MW de potencia. Uns instalación formada por 96.930 módulos de silicio policristalino de 415 W, montados sobre seguidores a un eje horizontal monofila.
Pero sin duda uno de los aspectos más interesantes de esta propuesta es que esta contará con dos pares de tanques de almacenamiento por sales fundidas que contará con una capacidad 1.900 MWh, que incluirá una línea de evacuación hasta la subestación de Carmona, y que le permitirá contar con una autonomía de 6.3 horas.
Además de aportar electricidad a la red, la planta fotovoltaica cubrirá parte de los consumos parasitarios de la instalación termosolar y estará preparado para evacuar hasta 98,06 MW. El proyecto está presupuestado en un total de algo más de 363 millones de euros.
Gracias a esta combinación, esta instalación puede aprovechar las sinergias entre estas tecnologías. Por un lado se puede aprovechar la energía generada durante el día por la instalación fotovoltaica y térmica, capaces de ofrecer un coste muy bajo. Por las tardes y noches toma el relevo el sistema de almacenamiento, que permite tanto seguir ofreciendo energía cuando no haya aporte solar, como servir para cubrir los picos de demanda de la red durante toda la jornada.
Un tipo de planta que además se distinguen por su flexibilidad, que les permiten adaptarse rápidamente a las necesidades de las redes eléctricas, tanto en respuesta como en capacidad de ampliación de sus capacidades.