El hub de electromovilidad es la primera opción para la fábrica ex Nissan en Barcelona

Siguen adelante las negociaciones para que un inquilino vuelva a estar en las instalaciones de la Zona Franca de Barcelona que Nissan ocupó durante 40 años. De hecho, hoy se ha producido la decimoquinta reunión de la comisión para la reindustrialización, la anterior fue el 17 de diciembre, ya con la negativa de Great Wall a ocupar las instalaciones y después del final de actividad definitivo de la empresa nipona.

La opción del hub de electromovilidad, proyecto liderado por QEV Technologies y con más de 20 participantes, vuelve a ser la preferida por la Comisión de Reindustrialización de Nissan. Las partes han dado luz verde a este proyecto, al que se le pide que forme una empresa y nombre a sus directivos. La próxima reunión será el 21 de enero de 2022, y será entonces cuando se evalúen los avances que se hayan hecho.

Además, la comisión ha pedido un compromiso con las instalaciones, ya que el consorcio estatal y autonómico las arrienda y quiere garantizar el empleo. Dentro del plan previsto, las dos líneas de producción que deja Nissan se van a emplear en la fabricación de distintos tipos de vehículos eléctricos. Los nuevos ocupantes tienen que presentar un plan explicando qué van a hacer, cómo lo van a hacer, y lo más importante, de dónde saldrá la financiación necesaria.

Por su parte, el fabricante de motocicletas y vehículos ligeros eléctricos Silence se va a quedar con las instalaciones de Sant Andreu de la Barca, salvo que aparezca una oferta mejor. Las partes -sindicatos, consorcio de la ZF y Nissan- también han bendecido esta opción. Obviamente, Silence también tiene que dar cuenta de sus planes y comprometerse con las instalaciones de forma duradera.

Respecto a Punch, se ha quedado en un segundo plano, y se está negociando para que se integre de alguna forma en el hub de electromovilidad. De momento los belgas no están por la labor. Mientras tanto, los administradores siguen buscando la forma de garantizar todo el empleo y actividad posibles en las tres plantas, la de la Zona Franca, la de Montcada i Reixac, y la de Sant Andreu de la Barca. La solución definitiva tal vez la conozcamos en primavera.