En los últimos años se ha iniciado una componente especulativa con algunos coches que empieza a dar miedo. En el caso concreto de los coches más exóticos o de lujo no es muy difícil que algunas unidades cuesten más «usadas» que nuevas, ya sea porque han estado en una vitrina, apenas han rodado, o son muy exclusivos.
Pero también pasa con algunos coches eléctricos, incluyendo los de Lucid, fabricante que no ha tenido tiempo para forjar una reputación a largo plazo, ni que destaca especialmente por su nivel de lujo o por haber estado en manos de algunos personajes famosos. Concretamente, hablamos de los Lucid Air Dream Edition, de los que solo se fabricaron fabricarán 520 unidades y empezaron a entregarse en noviembre de 2021 tras meses de espera.
Comienzan a aparecer en anuncios clasificados pero con un importante incremento del precio. Algunos primeros dueños hicieron una inversión más que comprar un coche, esperando su revalorización. Las leyes del mercado nos dicen que hay gente caprichosa dispuesta a pagar mucho más para saltarse una lista de espera o acceder a un modelo que se le ha escapado por agotarse.
En eBay tenemos varios Dream Edition, pero todos del modelo Performance, no del Range. Lidera la clasificación el que ofrece un vendedor profesional por la friolera de 249.900 dólares, casi 81.000 más que nuevo. No indica el número de serie, pero es de los primeros bastidores fabricados. Pintado en blanco y con apenas 200 kilómetros, parece no tener los plásticos de fábrica, pero está de reestreno si nos sobrase el dinero.
El segundo más caro que ha aparecido es el número 240/520, con apenas 27 kilómetros en el tablero, pintado también en blanco y con los plásticos de fábrica puestos. Está literalmente para estrenar, pero hay que aflojar 239.000 dólares, un incremento de 70.000 dólares sobre su precio recomendado (MSRP).
Seguimos con otro carillo, el número 34/520, pintado en color Eureka Gold y también con los plásticos de fábrica. Piden por él 225.000 dólares y el vendedor dice que lo mantendrá en un almacén «climatizado» durante semanas tras acabar la subasta. El kilometraje no se indica, pero se presupone también pelado.
Por encima de los 200.000 dólares también se encuentran el número 111/520 y un cuarto que no indica el número de la serie limitada. Los dos están pintados en Eureka Gold también, solo que el primero está por 210.000 dólares con más de 1.000 kilómetros -este al menos lo ha utilizado- y el segundo rebasa los 250 kilómetros y cuesta «solo» 206.000 dólares. No deja de ser 37.000 dólares más caro que nuevo.
Y me temo que seguiremos viendo estos anuncios durante una temporada, porque la reventa también afectará al Lucid Air Grand Touring. Por ejemplo, hay un anuncio en Craiglist de una unidad que se oferta por 189.000 dólares. Lo curioso es que no hay fotos porque es un coche que no se ha fabricado aún, faltan casi dos meses para que esté disponible. El anuncio nos recuerda que hay una lista de espera de dos años. No podemos saber si es un anuncio legítimo o una estafa. Lucid pide por uno nuevo 139.000 dólares.
Esto nos recuerda que recientemente conocimos el caso de un youtuber bien pagado en EEUU, Jon Rettinger, que rechazó un sobreprecio de 50.000 dólares en un Mercedes-Benz EQS que le quiso poner un concesionario, y se hizo con un Lucid Air. Se compró uno y ya lo tiene -por lo que ha tenido que pagar un sobreprecio de «km. 0»-. Todavía no ha subido ningún vídeo sobre él, pero dice que lo colgará la semana que viene. Por cierto, es un Dream Edition. ¿Habrá sido esto el detonante de la burbuja de este modelo concreto?