En unas semanas BYD presentará un nuevo coche eléctrico. Una berlina denominada Seal que adentra a la marca en un lenguaje de diseño muy europeo y que tiene en el viejo continente uno de sus principales objetivos. Una propuesta que ahora hemos podido conocer un poco más a fondo con la publicación de nuevas imágenes oficiales.
Como podemos ver, el aspecto del Seal es realmente redondo. Un diseño aerodinámico donde destacan elementos como un apéndice en forma de L similar al empleado por Renault en algunos de sus modelos. Su diseño estará lleno de pequeños detalles (dos tomas de aire con efecto 3D en el frontal, extractores en las aletas delanteras, tiradores de las puertas encastrados, taloneras con tres muescas para aligerar visualmente la línea lateral…). En la trasera el protagonismo recaerá en unos pilotos unidos por una tira LED y en el enorme difusor.
El Seal será una berlina del segmento D con un cuerpo a medio camino entre un Tesla Model 3 y un Model S. Medirá 4.80 m de largo, 1.87 m de ancho y 1.46 m de alto. Su distancia entre ejes será de 2.920 mm. Algo que nos indica que por tamaño, tendrá que enfrentarse a propuestas como el propio Model 3, o los próximos Hyundai IONIQ 6 y el Volkswagen ID.7, Mercedes EQE….etc.
Estará disponible en tres versiones, dos de tracción trasera y una de tracción total (esta última podrá hacer el 0 a 100 km/h en 3,8 segundos). El modelo de acceso tendrá una potencia de 204 CV (150 kW), mientras que el intermedio se irá a 313 CV (230 kW). El tope de gama combinará un motor de inducción de 218 CV (160 kW) en el eje delantero con uno síncrono de imanes permanentes y 204 CV (150 kW) en el trasero. Aunque no se ha filtrado su autonomía, los medios chinos estiman que rondará los 700 km CLTC.
Además de por su estética, el Seal destacará por el uso de una avanzada arquitectura que integra las baterías estructurales Blade de desarrollo propio, las cuales cuentan con un diseño Cell to Pack y celdas LFP (litio-ferrofosfato) y que además trabajará a 800 V, lo que le permitirá acceder a recargas ultrarrápidas (se estima que podrán recuperar 150 km en apenas cinco minutos) sin riesgo de dañar las baterías.
Una propuesta que en China arrancará con un precio de 31.200 euros al cambio, y su presentación estaba prevista para el Salón del Automóvil de Pekín. Pero el coronavirus podría afectar a esta, y retrasar el debut de un modelo que parece tenerlo todo para triunfar, y que veremos en 2023 en Europa.
