El joven fabricante de vehículos eléctricos Arrival ha dado otro paso hacia la producción en serie. No es un fabricante más, su enfoque innovador puede cambiar algún día la forma en la que la industria del automóvil trabaja hoy día. Su primer modelo, el Arrival Bus, ya está homologado en la Unión Europea y tiene la EUWVTA, es decir, homologación tipo de vehículo completo a nivel europeo.
Esta homologación sirve para todos los países de la UE y el Reino Unido, por lo que se cumplen todos los requisitos en materia de medio ambiente y seguridad. Los pasos siguientes consisten en empezar a fabricarlos, ponerlos a disposición de los operadores de transporte público y que inicien sus pruebas internas para evaluar las características del autobús antes de ponerlo en servicio.
El Arrival Bus está diseñado para las necesidades del transporte urbano: piso plano, accesible y con el máximo de plazas de pie. Tan solo restan espacio las estructuras que rodean las ruedas, como en todo autobús de este tipo. Arrival entregará los autobuses completos, incluyendo el carrozado, pantallas de información a bordo, barras de sujección, techo transparente, etc.
Arrival también se encargará de todo lo relacionado con las «funcionalidades digitales», lo cual puede significar control de flotas, geolocalización conectada al sistema de transporte público, mantenimiento más previsible, estado de la carga y recarga, etc. El fabricante se limita a decir que estarán totalmente conectados, que se pueden personalizar y tener acceso a la información del vehículo y a sus datos.
Las baterías ven bajo el piso, a diferencia de otros diseños de autobús como eCitaro de Mercedes-Benz. Asimismo, Arrival ha ganado experiencia en la homologación, la cual le sirve para otros vehículos que piensa hacer siguiendo su planteamiento modular. Arrival ha planificado fabricar autobuses, furgonetas, furgones y turismos con el máximo posible en estandarización de componentes.
A finales de 2020, Arrival esperaba fabricar el bus en el cuarto trimestre de 2021, así que van con retraso
Este enfoque le permitirá la producción de vehículos variopintos con fábricas más pequeñas, muy robotizadas y mucho más económicas de poner en marcha: microfactorías, según su nomenclatura. Arrival pretende producir vehículos tanto en Bicester (Reino Unido) como en Rock Hill (California, EEUU), y tener los primeros vehículos comercializables antes de que acabe este año. Esperan entrar en beneficios un año después.
