¿Quieres estar informado diariamente con las últimas novedades del mundo del motor?

Ahora no Permitir

El restyling del DS 3 Crossback comienza a rodar camuflado. ¿Qué mejoras incorporará la versión eléctrica E-TENSE?

El año que viene, Stellantis lanzará la segunda generación de la plataforma CMP, concebida para los segmentos B (utilitarios) y C (compactos). El primer modelo en beneficiarse de esta actualización, que también afectará a su versión eléctrica eCMP, será el DS 3 Crossback, que fue el encargado de estrenar esta arquitectura en el año 2018.

DS ya ha comenzado a testar en carretera abierta el restyling de mitad de vida del DS 3 Crossback. Más allá de los cambios mecánicos asociados a la adopción de la plataforma CMP/eCMP de segunda generación, el DS 3 Crossback estrenará un nuevo diseño frontal, que adoptará unas líneas más similares a las de los últimos lanzamientos de la marca (DS 4, DS 9). También se espera que el sistema de infoentretenimiento se actualice.

Las versiones térmicas del DS 3 Crossback disfrutarán de una nueva familia de motores mild-hybrid, mientras que el modelo eléctrico (E-TENSE) recibirá un tren motriz completamente actualizado que le permitirá mejorar sus prestaciones, su eficiencia y su autonomía, pasando a ser una opción más competitiva dentro del competido segmento B-SUV.

Actualmente, el DS 3 Crossback E-TENSE equipa un motor de 136 CV (100 kW) y 260 Nm de origen Continental, el cual se asocia a un pack de baterías de 50 kWh de capacidad bruta con refrigeración líquida. Su sistema de carga le permite alcanzar potencias de hasta 100 kW en corriente continua, pudiendo pasar del 10 al 80% de carga en 30 minutos.

DS 3 Crossback

El renovado DS 3 Crossback E-TENSE podría rondar los 400 km WLTP de autonomía

El año pasado, el modelo francés recibió una serie de mejoras (una nueva relación de transmisión, unos neumáticos con una menor resistencia a la rodadura, un sensor higrométrico que optimiza el funcionamiento del sistema de climatización y un nuevo software de control) que le permitieron mejorar su alcance en un 7%, pasando de 320 a 341 km WLTP.

De acuerdo con Stellantis, estas mejoras se tradujeron en una autonomía real notablemente optimizada a bajas temperaturas, pues el nuevo sensor higrométrico mejorara el funcionamiento de la bomba de calor que equipa el vehículo de serie, algo que notarán especialmente aquellos usuarios que residan en zonas frías.

Sin embargo, estas mejoras serán menores en comparación con las novedades previstas para el año que viene. Los rumores apuntan a que adoptará un nuevo propulsor de 156 CV (115 kW) y 270 Nm de origen Nidec notablemente más eficiente que la unidad actual. Su pack de baterías podría contar con celdas NCM 811 de última generación, pasando a 54 kWh de capacidad, lo que le permitirá rondar los 400 km WLTP.

Compártelo: Compartir en WhatsApp Compartir en Menéame